Seoane está siendo uno de los mejores. Foto: S.D. Huesca

Más que meritorio ha sido el punto que ha logrado la Sociedad Deportiva Huesca en el Alcoraz ante el Atlético de Madrid. Los de Míchel dejaron de ser once futbolistas para convertirse en un muro defensivo infranqueable. El resultado es todo un premio: un punto de oro ante el equipo del “Cholo”.

Imponía respeto la alineación del Atlético de Madrid. Desde atrás, con Oblak custodiando la portería, hasta arriba, donde Luis Suárez y Joao Félix tratarían de perforar la meta de Andrés Fernández. Por su parte, el 4-3-3 oscense partía con Siovas y Pulido de pareja de centrales y con Pedro López y Galán en bandas. Seoane, Mosquera y Mikel Rico secundaban a Borja García, Okazaki y Ferreiro.

Comenzaba aguantando bien el Huesca. De hecho, hubo un intercambio de internadas. Joao Félix por parte del Atlético y Ferreiro en el caso de los locales. Ya en el minuto 11, un disparo en la frontal del área de Mikel Rico tocaba en un defensa atlético y se marchaba a córner. En el 13, Lodi estuvo a punto de poner un pase de la muerte perfecto a Luis Suárez. La igualdad era máxima.

De nuevo Seoane, esta vez tras peinarla Siovas a la salida de un córner, podía poner el 1-0. Se la encontró y no pudo rematar en plenas condiciones, pero ese era el camino. Allá por el 24, una falta peligrosa sobre Saúl casi termina en gol de Joao, y un fallo defensivo de Felipe casi propicia el tanto en contra. De tú a tú, de igual a igual estaba jugando el Huesca ante el Atlético de Madrid.

Otra vez Mikel Rico estuvo a punto de abrir la lata para los locales, pero el disparo desde el punto de penalti se iba arriba. Así se llegaba al descanso. Sin goles, tarjetas ni revisiones en el VAR. Un Huesca valiente que se merecía no ir por detrás en el marcador. Habría que esperar a la segunda parte para ver el desenlace.

Resistencia en la segunda parte

Al “Cholo” no le convencía la actuación de sus futbolistas e introdujo a Correa en el descanso. Y se notó. De hecho, después de una genialidad de Joao Félix, Llorente enviaba el balón al travesaño. Primera llegada seria de los de Simeone. Thomas hizo lo propio, pero en una contra Ferreiro también disparó, esta vez a puerta. Eso sí, directo a las manos de Oblak.

Y llegó la más clara. Una asistencia maravillosa de Joao Félix, eléctrico desde el descanso, dejaba solo a Luis Suárez ante Andrés. Sin embargo, en el mano a mano decidió intentar un regate y se quedó sin ángulo. El 0-0 seguía vigente a pesar del asedio madrileño. El portugués estaba siendo un quebradero de cabeza, y estaba generando peligro serio.

Debutaba en las filas oscenses Ontiveros, futbolista clásico para desatascar encuentros. Con ese rol, Míchel daba entrada al ex del Villarreal. Mir también se vestía de corto como suplente. El Atlético se topaba una y otra vez contra una defensa que parecía un muro. Los visitantes al área y a la hora de intentar marcar no lo lograban. Costa, Joao, Carrasco… Ninguno podía perforar la meta de Andrés.

Los minutos finales fueron de auténtica tensión, un asedio constante. Balones una y otra vez al área, remates constantes de todos los jugadores e internadas peligrosas. Sin embargo, el Huesca continuaba siendo fiel a su estilo. El esfuerzo iba a merecer la pena. Se llegaba al descuento resistiendo con uñas y dientes. Y al final, llegó el premio. El colegiado pitó el final y el conjunto oscense arañaba un meritorio punto ante un equipo tan grande como el Atlético de Madrid.

LO MÁS VISTO

TE PUEDE INTERESAR