El Casademont se despide de su aventura europea frente al AEK (99-75)

El Casademont Zaragoza deberá pelear un año más por entrar en una final europea. Foto: Basket Zaragoza
photo_camera El Casademont Zaragoza deberá pelear un año más por entrar en una final europea. Foto: Basket Zaragoza

No pudo ser. El Casademont Zaragoza dice adiós a su campaña europea tras caer derrotado ante el AEK de Atenas. Es triste despedirse de este sueño, pero desde luego, se puede calificar la atípica temporada como un éxito. El conjunto liderado por Ocampo se jugará el tercer puesto este fin de semana ante el Dijon.

Empezaba de forma horrible el Casademont Zaragoza. Parcial de 10-0 en el primer tiempo muerto, que se iba hasta los doce nada más volver. Sin embargo, parecía que el engranaje maño comenzaba a funcionar, y tras un parcial de 8-0, se quedaba la cosa en 12-8. Sin embargo, era todo un espejismo. Ni había ritmo en las filas aragonesas, y atrás los griegos hacían sangre. Al final el resultado era 26-15.

El comienzo del segundo cuarto era exactamente igual que el final del anterior, una mera continuación de lo que había ocurrido en el primero. Había momentos mejores y peores, pero el AEK siempre lograba mantener una ventaja considerable en el electrónico. No funcionaba el equipo. Brussino no aparecía, Hlinason fallaba mucho, igual que Seeley…y todos. Al final, 53-32. A todo esto, Sulaimon lesionado.

Se preveía que iba a ser un encuentro de lo más complicado; no es fácil disputar unas semifinales de Champions contra el anfitrión. Sin embargo, se esperaba algo más de los de Ocampo, que debían hacer un trabajo arduo si querían lograr el premio. Aun así, estaban a tiempo de todo al llegar al descanso.

Ya a la vuelta, le salía todo al conjunto griego. Jugaban a placer ante un Casademont que parecía de juguete. 23 arriba el AEK de Atenas y 67 puntos a favor cuando todavía faltaban más de cuatro minutos. Parecían de gigantes los de la capital griega. El problema era la defensa, porque en ataque Javi García, Ennis y Seeley aún sacaban petróleo con algún triple. 83-57 y final del tercer cuarto.

Más de lo mismo en el cuarto. No había mucho que hacer. El partido estaba controlado en todo momento por el conjunto local, que se divertía de lo lindo con los maños. La producción ofensiva de los griegos era brutal, mientras que en el Casademont sucedía lo contrario. El partido terminaba 99-75.

Sin embargo, y a pesar de este triste final, había que reconocerle el mérito al Casademont Zaragoza. El equipo está sentando las bases para hacer algo grande. Y en esta primera experiencia europea larga, estos jugadores han ilusionado el corazón de los amantes del basket en Zaragoza. El equipo lo ha dado todo y no hay nada que reprochar. Toca pensar en la Liga Endesa.