Aragón encara las últimas horas de este 2020 para olvidar y prepara ya el comienzo del próximo año, que traerá consigo, presumiblemente, el fin de la pandemia. Sin lugar a dudas, ese será un deseo que compartirán no solo los aragoneses, sino la gran parte de la población alrededor del globo. El coronavirus dibuja una Nochevieja y un Año Nuevo diferentes, donde los encuentros familiares estarán necesariamente limitados y las muestras de cariño, lamentablemente, también.
El Gobierno de Aragón decidió el pasado miércoles mantener las medidas restrictivas vigentes actualmente contra la Covid-19, tanto en el nivel de alerta 3 con aforos ampliados en el que se encuentra la Comunidad como de restricción de movilidad con los confinamientos perimetrales de las provincias. El Departamento de Sanidad tomó la determinación de no levantar las restricciones ante la evolución epidemiológica, que experimenta una tendencia creciente. Además, la próxima semana se llevará a cabo una nueva revisión de los datos para determinar si es preciso tomar medidas suplementarias para frenar la evolución de la pandemia.
Por el momento, desde el pasado miércoles y hasta el 2 de enero se abre uno de los dos paréntesis planteados por el Ejecutivo autonómico para relajar un poco las prohibiciones y permitir los reencuentros familiares. Como ya sucedió entre el 23 y el 26 de diciembre, las reuniones serán de un máximo de diez personas en lugar de las seis habituales y se podrá circular entre provincias y comunidades con este motivo, contando siempre con una declaración responsable que acredite el vínculo. El Gobierno de Aragón, al contrario que otras regiones, eliminó el término “allegados” y limitó las visitas a los más cercanos.
Además, en Nochevieja, cada uno deberá estar en su casa antes de las 1.30 horas, mientras que el resto de días habrá que volver antes, a las 23.00 horas como máximo. El final del toque de queda no se modificará en ningún momento y será a partir de las 6.00 horas.
“Estamos en el ecuador del periodo navideño y se están cumpliendo las previsiones que estábamos manejando. Después de un periodo de estabilidad o meseta empezamos a notar las consecuencias de los primeros días de la actividad social propia de las Navidades”, valoró el director general de Salud Pública, Francisco Javier Falo. “La situación es inestable y buena parte de la respuesta está en el comportamiento ciudadano. Hay que disfrutar estas fiestas de manera responsable, con los más próximos y minimizando los riesgos”, añadía.
La declaración responsable es imprescindible
Tal y como sucedió en los días en torno a Nochebuena y Navidad, el documento de declaración responsable será imprescindible para desplazarse más allá de los límites provinciales y autonómicos. Si uno de los integrantes de la familia no lo lleva, no se considerará justificado el desplazamiento y se le sancionará por incumplimiento de la norma.
En esta declaración deberán constar los datos personales, el motivo del viaje, su justificación para salir de la provincia y la documentación necesaria para que se considere válidamente acreditado. También deberán aparecer quiénes los datos personales de los familiares visitados, su dirección completa y la relación de parentesco que les une a ellos. Posteriormente, en caso de que sea solicitado, el agente de la autoridad podrá hacer las comprobaciones que considere.