La búsqueda de Karim se amplía hacia el puente de La Almozara

La labores de los Bomberos se centran ahora en un tramo más abajo del punto donde se le vio por última vez
photo_camera La labores de los Bomberos se centran ahora en un tramo más abajo del punto donde se le vio por última vez

La búsqueda del menor de 13 años desaparecido desde el sábado cuando decidió darse un chapuzón en el río Ebro continúa por tierra, río y aire. Este lunes ha comenzado desde muy temprano el rastreo aguas abajo, cerca del puente de La Almozara. Karim salió con un amigo de un partido de fútbol y debido a las altas temperaturas que se vivieron el sábado en la capital decidió darse un baño en la ribera del río Ebro cerca de la Pasarela del Voluntariado. Fue un pescador el que dio el aviso de su desaparición sobre las 18.30 horas de la tarde.

El concejal delegado de Bomberos, Alfonso Mendoza, ha anunciado que tras la suspensión por falta de luz este domingo por la tormenta eléctrica se han incorporado esta mañana la Unidad de Guías Caninos y Protección Civil, que buscan algún rastro por las orillas de la ribera.

La zona en la que Karim decidió darse un baño es una zona de agua con mucha corriente y con una profundidad que ronda los tres y seis metros. “El río es muy tramposo, parece que muchas veces está en calma, pero las corrientes van por debajo”, ha advertido Mendoza. Esta zona de la ribera, muy urbanizada, podría tener debajo restos metálicos de obras recientes que pudieran haber retenido al menor. Estos restos de obras están obligando a los submarinistas a buscar con mucho cuidado el fondo del río.

“El Ebro es muy bonito, pero muy peligroso. No es el sitio adecuado para darse un baño y refrescarse”, ha explicado el concejal.

La tormenta eléctrica frenó la búsqueda del menor este domingo por la falta de visibilidad submarina. Los restos de la tormenta han aumentado el caudal complicando todavía más la labor.

El jefe de los Bomberos de Zaragoza, Eduardo Sánchez, ha calificado el rescate como “buscar una aguja en un pajar” debido al escenario móvil del río. Un helicóptero sobrevuela la zona de la ribera buscando cualquier indicio del menor. También por el aire los drones capturan ortofotos que son analizadas después.