El paso en ese momento del autobús urbano de la línea 53 por el camino del Pilón en Miralbueno salvó la vida de una mujer a la que apenas unos minutos antes su exnovio había clavado un cúter en el cuello. Fabio Colón trató de matar a su exnovia y lo hubiera conseguido si no es por el conductor del bus 53 que vio la terrible escena y salió al rescate de la mujer gravemente herida. Este lunes comienza el juicio que dirimirá la autoría del acusado. Fiscalía le solicita doce años y la acusación particular, ejercida por la víctima, pide para su expareja catorce años.
Según el escrito de acusación, la mujer decidió finalizar la relación con Fabio tras un periodo de dos años y medio. Este no se lo tomó bien y continuó mandándole mensajes por WhatsApp en la que le insistía en volver. Finalmente, el acusado consiguió convencer a su exnovia a que acudiera a su domicilio a por unas cosas que se había dejado.
Ella acudió en coche, y una vez recogió sus objetos, Fabio insistió en que le acercara a casa. Fue entonces cuando este le ordenó que siguiera conduciendo y cuando ella trató de alcanzar el móvil, la agarro del pelo, le mostró un cúter y le amenazó diciéndole “ahora vas a hacer lo que yo te diga y vamos donde yo te diga”.
Continuaron conduciendo y una vez colocó su vehículo en doble fila en el número 155 del camino del Pilón del barrio, se quitó el cinturón de seguridad, al ver el aumento de violencia de Fabio y trató de salir. Algo que este impidió clavándole el cúter en el cuello. Para pedir auxilio, la mujer salió del coche y trato de llamar la atención a algún viandante. Suerte que un conductor del autobús 53 observó lo ocurrido y consiguió ayudar a la mujer. Este varón también sufrió cortes en las manos cuando trató de quitarle navaja al acusado.
Hasta tres personas tuvieron que hacer falta para reducir a Fabio, que trató de quitarse la vida con la misma arma que apenas unos segundos antes había utilizado contra su exnovia. Este lunes comienza el juicio a Fabio Colón en la Audiencia Provincial de Zaragoza en la que esperan tres sesiones de juicio y en la que se le podría enviar hasta 14 años de prisión, como pide la acusación de su expareja.
