Nombre y apellidos para los casi 650 aragoneses que murieron en los campos nazis

De las víctimas aragonesas, 259 eran oriundas de la provincia de Huesca
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El Boletín Oficial del Estado ha publicado este viernes los nombres de las 4.427 personas de nacionalidad española que murieron en los campos de concentración nazis de Mathausen y Gusen, situados en el norte de Austria. De estas más de 4.000 víctimas, 649 eran aragonesas.

De las víctimas aragonesas, 259 eran oriundas de la provincia de Huesca -destaca el alto número de víctimas de esta provincia-, 207 de Zaragoza y 183 de la provincia de Teruel. El 90% de estas víctimas de este campo, al que llegaron a llamar “el campo de los españoles” eran personas pertenecientes al ejército republicano que huyeron a Francia tras el triunfo del franquismo en el año 1939 y fueron apresados por los alemanes tras la invasión de Francia en 1940.

Los españoles de los que Franco se desentendió

“Muchos de estos presos eran apátridas. Cuando Hitler le hace saber a Franco que tiene a más de 10.000 presos españoles a su cargo, Franco se desentiende y le dice que esos no eran españoles”, señala Enrique Gómez, de la Asociación por la Recuperación de la Memoria Histórica de Aragón (Armha), que denuncia que el dictador “dejó a su suerte” a todos estos presos republicanos para que fueran “masacrados y machacados” por los alemanes.

Para ARMHA esta publicación es una gran noticia para “resarcir la dignidad y devolver la identidad a muchos de estos represaliadados”. “Era Stalin el que decía que la muerte de un hombre es una tragedia y la de miles, una estadística. Ponerles nombre, dignificarles y darles voz es fundamental para ir destapando poco a poco el velo de silencio en el que se sumió la memoria histórica respecto a la transición”, aclaraba Pérez

Recuperar los nombres

Actualmente, existe el proyecto www.aragonesesdeportados.org, en el que se pueden consultar muchas de las biografías de estos represaliados. Historias como la de Pascual Ortín, de Crivillén, fallecido en las canteras de Gusen en 1941 o Miguel Alcubierre, de Tardienta, hacinado junto a su hijo José, de 14 años y fallecido por agotamiento en marzo de 1941.

Las personas interesadas en presentar alegaciones podrán hacerlo a partir de este viernes en el plazo de un mes y en internet a través de dos enlaces a páginas web que aparecen en el edicto publicado en el BOE.

Además, se ha establecido el 5 de mayo como día de homenaje a estas víctimas.