CEOE confía en el magnetismo inversor de Aragón para mantener a flote su crecimiento

CEOE Aragón ha analizado en un foro todos los indicadores de desaceleración para trazar una estrategia de acción
photo_camera CEOE Aragón ha analizado en un foro todos los indicadores de desaceleración para trazar una estrategia de acción

El conjunto del tejido empresarial avista cada vez con mayor certeza un enfriamiento en la economía mundial. Las guerras comerciales, la inestabilidad política planetaria o la administración de los organismos internacionales ante las políticas monetarias están provocando una ralentización que empieza a generar preocupación a escala local. CEOE Aragón ha analizado en un foro todos los indicadores de desaceleración para trazar una estrategia de acción y minimizar sus posibles efectos. Todavía no debe generarse la alerta, dicen, porque no es una situación “de crisis”. Lo “recomendable” es mantener “la precaución”.

El presidente de la Confederación aragonesa, Ricardo Mur, ha trasladado sin pretextos la “creciente preocupación” que padece actualmente el empresariado aragonés. La Comunidad, el país, Europa y el mundo en general está asistiendo a un serial de “factores riesgo” que no han hecho sino acelerar una moderación del crecimiento económico internacional, que inexorablemente termina por repercutir en la actividad más próxima.

La pugna comercial entre China y EE.UU, la escalada de tensión en el Golfo Pérsico, el Brexit y los vaivenes políticos dentro de las fronteras españolas conforman un porfolio de incontinencias que ya han provocado la caída en las exportaciones de bienes y servicios, la inversión o el empleo. Sin embargo, CEOE confía en que tanto España como Aragón encuentren la fórmula para seguir moviéndose con soltura a medio plazo. La clave para ello, en palabras del empresariado, debe pasar por “trabajar de la mano” y trazar estrategias conjuntas que se centren en lanzar “mensajes” coherentes y efectivos para atraer, sobre todo, la inversión.

En ese campo, desde CEOE aseguran que Aragón es la plaza “perfecta”, porque cuenta con la “fortaleza suficiente” en cuestiones de territorio, talento, innovación, desarrollo sostenible y estabilidad política. Por ello, confían en que, a pesar de los venideros avatares económicos,  Aragón pueda mantener a flote su cifra de crecimiento -y ese representativo 2% del PIB-, siendo la “mejor opción” para los inversores.