Pombo acompañará a Suárez en la punta zaragocista en Soria

El canterano será titular y Linares volverá a la convocatoria
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Un estado de shock evidente. Así ha definido el entrenador del Real Zaragoza, Víctor Fernández, el sentir del vestuario tras la preocupante noticia de la semana en el conjunto aragonés: el problema de salud de Dwamena que le obliga a dejar de forma indefinida la práctica deportiva. ¿Pero cómo puede afectar esto al devenir anímico y deportivo del grupo?

Respecto a lo primero, el del barrio Oliver ha explicado que “ha sido un golpe directo porque es un chico muy querido en la plantilla, siempre está dando abrazos, teniendo una sonrisa y una actitud de ayudar a los compañeros”, añadiendo que están “conmocionados”. Eso sí, invita a “afrontar la situación intentando superar la adversidad, estar todavía más fuertes, unidos y luchar por conseguir el primer triunfo en Soria para poder brindárselo”.

Ahora, Víctor Fernández debe buscar soluciones deportivas al problema surgido. Es Jorge Pombo el que cuenta con todas las papeletas para acompañar e Luis Suárez en la punta zaragocista en Los Pajaritos. Situación que también beneficia a otro jugador, hasta ahora no utilizado. “Linares entrará en la convocatoria, está entrenando bien, si no lo hiciera no entraría”, ha manifestado el técnico.

Pero a Víctor se le acumulan las preocupaciones. De hecho, según palabras literales, “hay 4 o 5 jugadores que están muy lejos” de cómo le gustaría que estuvieran. Incluso ha dado un recado con destino incierto: “Otros que no conocéis me preocupan porque no están empujando lo que deben empujar en cuanto a su recuperación”.

No es el caso de Igbekeme, según ha confirmado, aunque sí ha admitido que “aún no ha jugado ningún partido que se acerque a su nivel de la temporada pasada, sólo el amistoso ante el Alavés”. También ha tenido palabras hacia Soro, destacando su actitud y trabajo en los entrenamientos pero explicando que “se tiene que soltar, parece que tiene grilletes en su fútbol y tiene que recuperar la inspiración y más atrevimiento”.

Con todo, y parece haber quedado a un margen, asoma el Numancia como rival y lo hace tras ocho partidos seguidos sin conocer la derrota. El Real Zaragoza, cuatro consecutivos sin encontrarse con el triunfo. Ingredientes que sumados a la convulsa semana en el grupo zaragocista no invitan al mayor optimismo. Eso sí, el equipo está capacitado, ya lo ha demostrado, para hacer frente a todo y salir victorioso.