Aragón se adentra en el tercer fin de semana de octubre recubierto de una meteorología bien propia de la estación otoñal. Llegan, por fortuna o desventura, los chubascos a todas las provincias aragonesas, y una importante bajada de temperaturas que empezarán a asomarse el domingo.
Para el sábado, Huesca amanecerá con cielos cubiertos que irán progresivamente recargándose de una lluvia que terminará por dejarse caer durante toda la tarde. Las temperaturas, eso sí, se mantendrán entre los 13 de mínima y los 20 de máxima. En Zaragoza, panorama similar. Durante prácticamente toda la jornada se esperan chubascos de carácter moderado, sobre todo, de cara a la tarde. Los niveles térmicos todavía resistirán rozando los 25 de máxima. En Teruel parece que no lloverá, aunque las mínimas ya se desplomarán hasta los 9 grados.
Para el domingo la meteorología empeorará de manera generalizada. En Huesca, podría seguir chispeando a intervalos, aunque el mayor cambio se apreciará en la caída de temperaturas, que rozará los 7 de mínima. En Zaragoza el sol hará momentáneos actos de presencia, pero también bajarán los niveles térmicos, aunque serán los turolenses quienes noten más el frío, porque sus mínimas apenas sobrepasaran los cuatro grados. Aun así, este fin de semana será tan solo un anticipo de las tormentas de alta intensidad que se descargarán por toda la Comunidad la próxima semana.
