Zaragoza conmemora el 75 aniversario de la liberación de Auschwitz para hacer imborrable su memoria

El acto se ha celebrado en el Salón de Recepciones del Ayuntamiento de Zaragoza
photo_camera El acto se ha celebrado en el Salón de Recepciones del Ayuntamiento de Zaragoza

El Ayuntamiento de Zaragoza ha celebrado un acto de homenaje a las víctimas del nazismo y en conmemoración del 75 aniversario de la liberación de Auschwitz y el 40 aniversario del fallecimiento de Ángel Sanz Briz, conocido como el “Ángel de Budapest”, por haber salvado la vida de unos 5.000 judíos, proporcionándoles pasaportes españoles. Un acto en el que ha intervenido Enrique Szlamowicz, quien ha contado su historia como superviviente judío del Holocausto. Actos que para el alcalde Jorge Azcón son necesarios para evitar que la historia se repita.

Enrique Slamowicz nació en 19942, en la Bélgica ocupada por los nazis. Fue salvado por una pareja belga, que le ocultó hasta que terminó la guerra. Su madre fue presa y falleció en Auschwitz, su padre y su hermana tuvieron más suerte y sobrevivieron. Cuando terminó la guerra volvieron a reunirse. Actualmente tiene 77 años y vive con su esposa en Israel. Han tenido seis hijos, que les han dado 16 nietos y tres bisnietos, algo que, por lo que él mismo dice, “posiblemente Hitler se estará revolcando en su tumba”.

La vida para él continuó junto a su padre y su hermana mayor, pero admite que fue especialmente difícil “vivir a la sombra de un padre que sufrió la guerra y perdió a su esposa”. “Sufrió”, ha relatado. “Era un hombre con miedo, que no dormía y muy nervioso. No fue fácil convivir con él”, ha lamentado.

Enrique ha contado su historia en Zaragoza, porque siente que es una de las últimas personas “capaz de hacerlo”. Y es que sabe que la mayoría ya no puede, por tener más de 90 años, o porque no quieren hablar de ello, como su propio padre, al que siempre que preguntaban “trataba de evitar el tema y acababa contestando algo, pero nunca nada por sí mismo”. Cuando terminó la guerra Enrique tenía tres años, por lo que no recuerda los acontecimientos. “Yo no sufrí”, reconoce, pero su hermana tenía nueve años más que él “y se acuerda de todo”.

Ahora enrique es profesor y ha llevado a sus alumnos a visitar este campo de concentración. Enrique se ha dado cuenta de que, aunque alguno de sus alumnos se inclina a la derecha o al nacionalismo, la mayoría “son más liberales, capaces de aceptar todas las ideas y son más democráticos”. “Hay esperanza”, afirma.

Reconoce que la crisis económica es la culpable de alimentar el antisemitismo, pero tiene esperanzan en las nuevas generaciones, porque “son más liberales y democráticos” y confía en que “no permitan que vuelva a ocurrir algo así”. Sobre el avance de la extrema derecha en Europa en general y en España en particular, Enrique insiste en que, ante los periodos de crisis económica, la gente “busca a los culpables”, y el culpable, lamenta, “siempre es el judío”.

Con este acto, ha dicho el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, Zaragoza quiere aportar su “granito de arena” para que “no se olvide la historia, el Holocausto y todo el dolor y barbarie que supuso el nacionalsocialismo”. Por ello, ha dicho, “es importante poder oír a las personas que todavía pueden alzar la voz y contar lo que fue uno de los periodos más negros en la historia de la humanidad, sin ningún género de dudas”.

Recordarlo, estudiarlo y celebrar actos como éste, ha subrayado Azcón, “es una obligación, sobre todo para transmitirles a los más jóvenes qué es lo que significó esa barbarie”. “Estamos encantados de aportar ese granito de arena y no olvidar lo que ocurrió en el pasado para no repetirlo en el futuro”, ha destacado.

Azcón ha anunciado que el Ayuntamiento prepara, de cara a las inversiones que hace cada año el Consistorio para el Día de Todos los Santos en materia de patrimonio, recuperar una parte del patrimonio de Ángel San Briz. “Estamos trabajando en ello, aunque creo que no es lo único que van a hacer, pero será posiblemente la parte más importante”, ha dado a conocer el alcalde.