Lambán reconoce contactos con la Generalitat por los JJOO de 2030 pero con "avances modestos"

Lambán también ha confirmado, para “disipar algunos temores”, que cualquier proyecto estará "estrictamente sujeto a criterios de sostenibilidad"
photo_camera Lambán también ha confirmado, para “disipar algunos temores”, que cualquier proyecto estará "estrictamente sujeto a criterios de sostenibilidad"

El presidente de Aragón, Javier Lambán, ha reconocido este jueves que ya hay contactos con la Generalitat de Cataluña para presentar una candidatura conjunta a organizar los Juegos Olímpicos de invierno de 2030. Unas conversaciones en las que está implicado personalmente Pedro Sánchez y que todavía se encontrarían en fase inicial, pese a que el presidente del COE, Alejandro Blanco, ya se lanzara a anunciar un “acuerdo casi total”.

Así, Lambán ha defendido, en declaraciones a los medios de comunicación, que organizar este evento supondría una “excelente noticia” para la Comunidad. “Ya ha habido varios intentos fallidos, pero en esta ocasión se plantea conjuntamente con Cataluña para que sean unos Juegos Olímpicos de todo el Pirineo”, ha señalado, recordando los intentos por convertir a Jaca en sede de esta cita mundial.

No obstante, el líder del Ejecutivo aragonés se muestra cauto, exponiendo que se tratan todavía de “avances bastante modestos”, aunque no duda de que seguirá habiendo contactos entre representantes de ambas instituciones. Contactos que no han incluido ni está previsto que incluyan un diálogo entre Lambán y el presidente catalán, Quim Torra, tal y como ha afirmado el propio dirigente socialista.

Además, Lambán también ha confirmado, para “disipar algunos temores”, que cualquier proyecto estará “estrictamente sujeto a criterios de sostenibilidad, de respeto al medio ambiente”. “Nada hay que temer ante posibles actuaciones que fueran poco recomendables desde el punto de vista medio ambiental y sí hay mucho que esperar de una noticia que reforzaría nuestra posición internacional”, ha expuesto.

Por otro lado, el presidente aragonés, siempre muy crítico con Quim Torra, cree que una de las “virtudes” que tendría este proyecto sería “el efecto político que podría suponer”, ya que “contribuiría mucho a que el contencioso que tiene abierto Cataluña con el Estado español se aminorara”. “Una de las esperanzas que se tiene desde el ámbito nacional con este proyecto es que supusiera un reencaje de Cataluña en España”, ha mantenido Lambán.

Ahora, y pese a que el horizonte de 2030 está lejano, los trabajos no deben cesar para tener todo preparado para la designación de la sede. “No tenemos ningún plazo concreto, pero no debemos dormirnos en los laureles. Hay que valorar ya las posibilidades existentes seriamente. A ver lo que va dando de sí en los próximos meses”, ha añadido.