Desarticulado en Huesca un grupo criminal por estafar casi 37.000 euros en ventas fraudulentas por Internet

La banda criminal estaba compuesta por tres hombres y una mujer
photo_camera La banda criminal estaba compuesta por tres hombres y una mujer

La Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía han desarticulado un grupo criminal, compuesto por cuatro personas, que habría estafado 36.790 euros mediante la venta fraudulenta de artículos y alquileres de inmuebles en conocidos portales de Internet. A los 4 miembros de la red se les imputa un delito continuado de estafa, usurpación de identidad y pertenencia a grupo criminal. Hasta el momento se han localizado 71 víctimas, 66 de ellas víctimas de estafa y 5 de usurpación de identidad, residentes en Aragón, Andalucía, Cataluña, Galicia, País Vasco, Navarra, Comunidad Valenciana, Madrid y Canarias.

La investigación ha sido desarrollada por el Equipo de Patrimonio y Equipo de Investigación Tecnológica de Policía Judicial (Edite) de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Zaragoza y Huesca respectivamente, Unidad de Drogas y Crimen Organizado (Udyco) de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Cuerpo Nacional de Policía de Lleida.

Los componentes del grupo criminal, 3 hombres y una mujer, a los que no les constaba domicilio habitual, fueron localizados y detenidos en Huesca capital entre los días 4 y 5 de marzo. Tras quedar a disposición judicial en el Juzgado de dicha ciudad, se decretó el ingreso en el Centro Penitenciario de Zuera de dos de ellos.

La operación se inició conjuntamente en febrero, cuando ambos cuerpos policiales se hallaban investigando una serie de denuncias por estafas llevadas a cabo con el mismo modus operandi y con los mismos posibles autores.

La investigación permitió determinar que se trataba de un grupo organizado que actuaba a nivel nacional y cuyo modus operandi consistiría en ofertar artículos y alquileres de inmuebles en conocidos portales de internet, nutriéndose incluso de identidades usurpadas, cuyos nombres se utilizaban como contacto en los anuncios y como titulares de números de teléfono para proceder a la estafa.

Las víctimas realizaban el pago de los artículos mediante transferencias bancarias y plataforma Bizum, cuyos titulares eran dos componentes de la red, quienes derivaban ese dinero de manera inmediata a otras cuentas bancarias del resto de miembros o lo extraían en cajeros automáticos.

Tras el análisis de todos los movimientos de las más de 10 cuentas bancarias utilizadas para cometer las estafas y que fueron abiertas en 9 entidades distintas, se comprobó que el grupo criminal tenía altos conocimientos en el manejo tanto de plataformas de venta online como del funcionamiento de sistemas de pago, así como que se habían especializado en estafas, en una actividad que se remontaba al año 2018. Actuaban de manera conjunta, sin tener un líder definido y el reparto de los beneficios obtenidos se lo distribuían de manera equitativa.