La Guardia Civil ha denunciado a un ciclista de Caspe que realizaba constantes rutas en bicicleta, saltándose el estado de alarma. Fue interceptado por los agentes al colgar imágenes de sus rutas en las redes sociales.
El pasado 20 de marzo el Club Ciclista de la ciudad de Caspe (Zaragoza) comunicó a la Guardia Civil que uno de sus socios estaba realizando rutas por caminos rurales desde que se declararon las restricciones del estado de alarma.
Además, el ahora denunciado, de 37 años, colgaba fotografías e incluso las rutas -con el mismo recorrido- en la red social Instagram. En sus publicaciones se jactaba de las personas que siguen las medidas de confinamiento: “Viviendo mi vida soy feliz y sin preocupaciones de lo que piense la gente que no me importa ni una “mierda” y si ellos están tan amargados y presos en sus casas. No es mi culpa, indignaros con la gente que os engaña y se ríe en vuestra cara…”.
Gracias a estas publicaciones, la Guardia Civil y la Policía Local identificaron al varón de 37 años, y gracias a las imágenes de sus rutas colgadas en la red se le consiguió interceptar al volver de una de sus vueltas.
El ciclista, que circulaba con la bicicleta a gran velocidad por las calles del casco urbano, hizo caso omiso a las señales acústicas y luminosas de los agentes para que se detuviese, pero fue interceptado cuando iba a acceder al garaje de su vivienda.
Esta persona alegó que se desplazaba a diario, en bicicleta, a un campo de su propiedad, comprobando los agentes que el ciclista no poseía ninguna finca. Por todo lo anterior, este varón fue denunciado por desobediencia a agente de la autoridad, al incumplir las medidas establecidas en el real decreto del estado de alarma.
