El Ayuntamiento de Zaragoza ha presentado las bases de la convocatoria de las “Ayudas a la Rehabilitación 2020” enmarcadas en el “Programa de Rehabilitación 2020-2023”. Consisten en cuatro líneas de ayudas dotadas de 6,8 millones de euros divididas en eficiencia energética (2,8 millones) accesibilidad (1.020.000 euros), y las dos últimas destinadas a particulares de 612.000 y 2.720.000, respectivamente. Estas ayudas, cuyas bases se aprobarán en junio, podrán empezar a solicitarse durante 90 días tras la aprobación pudiendo resolverse en torno a otoño.
La concejala delegada de Vivienda, Carolina Andreu, ha alabado una cifra “récord e histórica” en la estrategia local de rehabilitación y accesibilidad. Unos objetivos, ha dicho, “que se enmarca dentro del programa de gobierno y de la Comisión por el Futuro de Zaragoza”. “Estas últimas semanas hemos estado reunidos con agentes clave para informarles y recoger sus reclamaciones”, ha reconocido asegurando que han salido “propuestas muy interesantes como ampliación de plazo, calderas, carpinterías, antideslizantes…”.
Andreu ha recordado la centralización de las líneas en cuatro: tres de ellas destinadas a edificios y otra a viviendas de particulares. Con 6,8 millones se podría alcanzar una inversión de 18.600.000 euros que beneficiaría a 1.192 viviendas y 2.800 personas y que, además, generaría 335 puestos de trabajo dineros. Estas ayudas acogerán obras desde el 1 de enero de 2020 pudiendo así beneficiarse propietarios con obras ya realizadas. Asimismo, ha explicado la concejala que “los procedimientos se han simplificado y el canal digital acompañará a la presencialidad”.
Detalles de las cuatro líneas
La primera línea, destinada a la eficiencia energética, beneficiará a comunidades y propietarios que realicen obras integrales para la mejora de la eficiencia energética. Las ayudas variarán según si la obra es únicamente para eficiencia o si incluye obras de accesibilidad que llegarán hasta el 45% o 55% del presupuesto con un límite de 12.000 o 16.000 euros.
La accesibilidad es el objetivo de la línea dos que “con la pandemia se ha puesto encima de la mesa la necesidad de ascensores, bajarlos a cota cero…”, ha dicho Andreu, asegurando que en Zaragoza hay un 19% de viviendas con más de tres alturas sin ascensor. “Es una línea prioritaria y que da respuesta a la demanda que hemos recibido desde distintos colectivos”, ha añadido. Los beneficiarios son comunidades en las que haya vecinos mayores de 65 años o con discapacidad igual o mayor al 33%. Aquí la accesibilidad completa es una obra obligatoria y la cuantía irá desde el 35% al 45% con un límite de 6.000 euros.
Las líneas tres y cuatro van dirigidas a particulares. En concreto la tres la solicitan particulares y van para obras en la comunidad. Son ayudas a los particulares que residan en viviendas que accedan a una obra de eficiencia o accesibilidad y necesitan una mayor ayuda pudiendo llegar a financiar el 70% u 80%.
La última línea va destinadas a particulares que han obras en el interior de la vivienda priorizando siempre a colectivos con menores, mayores o discapacitados empezando por las rentas más bajas y para obras de accesibilidad, eficiencia energética o conservación. La cuantía máxima será del 50% con un límite de 6.000 euros por vivienda.
