El mural de la Puerta del Duque de la Victoria recupera su esplendor

Los trabajos de recuperación en el mural de la Puerta de la Victoria, situado en la plaza de San Miguel, encaran ya la recta final del proceso. Desarrollados por el taller profesional del pintor Pepe Cerdá, el coste de reparar la fachada y recuperar el mural asciende a unos 50.000 euros asumidos desde Urbanismo. Además, el Ayuntamiento ha tenido que solucionar una cuestión jurídica sobre que el edificio que soporta el mural no fuese de propiedad municipal.

El edificio situado en la calle Reconquista número 4, donde estaba situado el mural, tuvo que someterse hace más de un año a unas obras de recalce de su cimentación. Las grietas y desprendimientos de la fachada a principios de año llevaron al consistorio a tomar medidas y recuperar la obra pictórica con el mismo tamaño, composición, figuración y colores que la original. “La idea es que, si un ciudadano ha viajado al extranjero y vuelve, no note la diferencia con el mural anterior, ha explicado el pintor encargado de la obra, Pepe Cerdá. Asimismo, Cerdá ha incidido en cómo este mural es un “icono de la zona” y en la importancia de que no sea “traumático para los vecinos”.

Arantza Horno es la pintora que, junto con sus compañeras Ana Nicolás y Mercedes Lafuente, han trabajado durante dos meses en el mural. “Hemos hecho muy buen equipo, ya que cada una tiene su parcela y sabe lo que tiene que hacer”, ha comentado Horno, quien se vanagloria en elogios hacia sus compañeras, siendo una restauradora de profesión y otra “que hace cualquier cosa que le digas, es una todoterreno”.

El mural previo estaba elaborado con pintura plástica y esta, cuando llegan cambios de temperatura y clima, “hace película y se puede separar de la pared”, explica Arantza. El nuevo mural está pintado con pintura de silicato, que “penetra dentro de la pared y queda fija”, formando un único cuerpo y siendo mucho más duradera. Hace dos meses, Arantza, Ana y Mercedes calcaron el dibujo en la pared con unas telas y, a partir de ese momento, comenzaron con la primera mano de pintura de silicato. Se prevé que esté terminado en unas dos semanas.

Más de 30 años

La pintura mural representa la Puerta del Duque de la Victoria, que había formado parte de la plaza desde 1861 hasta 1919. El autor del diseño fue el arquitecto José Lanao, mientras que el encargo de trasladarlo al muro, aproximadamente entre los meses de febrero y junio de 1988, fue a Alfonso Forcellino.

Protección jurídica del edificio

“El edificio donde se sitúa el mural no es de propiedad municipal, sino de la comunidad de propietarios del número 4 de la calle”, ha expresado el consejero de Urbanismo y Equipamientos del Ayuntamiento de Zaragoza, Víctor Serrano. Por ello, el área de Urbanismo ha tenido que solucionar una cuestión jurídica y negociar con la propiedad del inmueble “que se permitiese a este Ayuntamiento la patrimonialización del bien y el derecho a intervenir sobre el mural en orden a su protección”.

La pared es resultado de la demolición en su día del edificio número 2 de la misma calle, de propiedad municipal. Este mural se pensó para otra fachada, no para este muro y, tras un error técnico, se ejecutó la intervención sobre un bien que no era propiedad municipal, el del número 4.