Fin de la jornada 27 de la Segunda División española y el Real Zaragoza vuelve a encontrarse en situación de emergencia. La derrota ante el Real Oviedo en el Carlos Tartiere ha encendido de nuevo las alarmas del conjunto maño, que vuelve a quedarse a las puertas del descenso a Segunda B. La victoria es de urgencia máxima.
El Real Zaragoza suma actualmente 27 puntos, que son los mismos que alcanza el Sabadell, actualmente ocupante de la posición número 19. 26 son los del Alcorcón y 25 Castellón y Albacete, últimos y penúltimos respectivamente. Con una victoria en los últimos dos partidos, los maños se hubiesen ido hasta los 30, en una posición algo más favorable.
Hay otro problema añadido para el conjunto de Juan Ignacio Martínez, y es que faltan muchas jornadas por disputarse todavía. De esta forma, todavía deben sumar al menos 23 puntos además de los 27 con los que cuenta su casillero. Llegar a los 50 puntos es la garantía de la salvación, y el Real Zaragoza necesita sumar de tres en tres para hacerlo.
Ante el Real Oviedo es cierto que se vio cierto cambio de actitud en el sentido positivo de la palabra. No fue como ante el Alcorcón, que parecía que el partido se ganó antes de jugarlo. El problema de este choque fue la falta de ideas. La poca claridad con el balón y la ausencia de un estilo sin él propiciaron que el Oviedo, en un importante despiste defensivo, se llevase la victoria. Los asturianos estuvieron a la altura de los blanquillos, pero un error decantó el choque.
Y ahora, el conjunto maño tiene otra oportunidad de resarcirse de su error con una victoria y acercarse a los 50 de la salvación. Será el Tenerife el conjunto que visite el estadio municipal de La Romareda el próximo sábado a las 16.00 horas. Aquí se la juegan los de JIM, porque una derrota podría devolverles a los puestos innombrables. La exigencia es absoluta y la victoria indiscutible para un Real Zaragoza que cree en la salvación.