El futuro Museo del Ferrocarril de Aragón ya cuenta con un total de 99 vehículos después de que la Asociación Zaragoza de Amigos del Ferrocarril (Azaft) haya aportado 40 piezas más para crear un espacio de difusión del legado del tren en la Comunidad. Contará con tres sedes en Canfranc, Zaragoza (aún por determinar) y Camínreal, esta última ya bastante avanzada, aunque todavía no hay fecha para su inauguración.
Una de las primeras realidades de este futuro museo es un tren azul que ya recorrió el trayecto entre Lisboa y París desde 1926 y que ha sido rehabilitado en diversas ocasiones hasta la fecha, con el objetivo de convertirlo en un tren museo itinerante y que este trocito de historia pueda llegar a diversas localidades. Constaba de tres coches postal, dos coches estafeta postal y un furgón postal; un coche restaurante reformado en los años 60 y un coche de cama de los años 70. “El material que tenemos en Aragón es espectacular”, ha definido el director gerente de la Fundación de Ferrocarriles Españoles, José Carlos Domínguez.
En uno de estos coches, un vagón preparado para reuniones entre miembros del Consejo de Ministros o importantes personalidades, el consejero de Vertebración del Territorio, José Luis Soro, el presidente de Azaft, Carlos Abadías, y Domínguez han firmado tres documentos de colaboración que servirán para avanzar en el asesoramiento para el diseño de futuro Museo del Ferrocarril de Aragón y en la cesión, cuidado, puesta en valor y gestión del material ferroviario.
Por otra parte, una vez se defina la fórmula organizacional que se vaya a utilizar para la implantación y ejecución del proyecto del futuro Museo del Ferrocarril de Aragón, el Gobierno de Aragón ofertará a la Fundación y Azaft que se integren en los órganos de gestión de la misma en la fórmula que considere dentro del proyecto. “Cuando quieres tener éxito en un proyecto, lo mejor es rodearte de los mejores, de los que más conocimiento y experiencia tienen en esta materia, y más si tienen la pasión por este tema que llevan décadas demostrando”, ha señalado el responsable de movilidad del Ejecutivo autonómico.
Un ferrocarril que no solo goza de un legado “glorioso”, sino que es clave para el futuro de la Comunidad. “Es clave para desarrollar nuestro potencial logístico, vertebrar el territorio y garantizar la cohesión social. El ferrocarril no es una opción, es una obligación. Es imprescindible para descarbonizar la economía”, ha remarcado Soro.
El Museo del Ferrocarril de Aragón contará con tres sedes que estarán ubicadas en Caminreal – Fuentesclaras, donde ya se está trabajando en el edificio de la antigua estación y donde se contempla una nave con dos vías y capacidad para 14 vehículos; en Canfranc, donde se usará la antigua rotonda de locomotoras, el cuarto de agentes anexo y unas vías colocadas en las cercanías; y en Zaragoza, en un espacio todavía por determinar.
