La escasez de lluvias en la primavera reduce la cosecha de cereal de invierno en 500.000 toneladas

La organización ha presentado estos datos durante la reunión sectorial celebrada este miércoles en Madrid
photo_camera La organización ha presentado estos datos durante la reunión sectorial celebrada este miércoles en Madrid

La escasez de lluvias durante la primavera en el sur de Huesca y el centro de la provincia de Zaragoza va a provocar una reducción en la cosecha de cereal de invierno de unas 500.000 toneladas. En concreto, según los datos de Asaja, se prevé recolectar hasta dos millones de toneladas en toda la Comunidad, lo que dejaría una caída del 21%.

Desde la asociación agraria destacan que el invierno “fue benévolo y dejó a los sembrados bien preparados”, pero “las escasas lluvias en la primavera, nulas en algunas zonas, va a condicionar seriamente la producción de cereales de invierno en Aragón”. Así, de los dos millones de toneladas que se recogerán por todo el territorio, 960.000 serán en Huesca, donde la reducción se situará en el 16%, “a expensas de que termine de forma correcta el llenado de las cebadas tardías en el sur y norte de Aragón y del trigo para lo que precisan lluvias y temperaturas suaves”, anotan desde Asaja.

La organización ha presentado estos datos durante la reunión sectorial celebrada este miércoles en Madrid, donde se ha hecho hincapié en la necesidad de dar solución a una serie de problemas que afectan a los productores cerealistas, especialmente la prohibición de quema de restos de cosecha; los daños producidos por la fauna cinegética; la falta de reciprocidad en las importaciones de cereales y la volatilidad de los precios.

Respecto al daño generado por la prohibición de la quema de los restos de cosecha, los agricultores piden “sensibilidad” a las administraciones, ya que esta práctica es una herramienta con la que siempre ha contado el agricultor y que le ha facilitado el control de plagas y malas hierbas. “Un año más se ha demostrado que la eficacia de las materias activas que van quedando en el mercado cada vez es menor, por lo que la quema resulta cada vez más necesaria y constituye una herramienta útil para el agricultor”, han explicado.

Otra de las conclusiones de esta sectorial tiene que ver con las importaciones de cereal. Desde Asaja se reclama que se incrementen los controles en frontera y se exija “reciprocidad” a aquellos productos procedentes de terceros países, ya que estos, en muchas ocasiones, “no cumplen con las exigencias que se imponen a las producciones europeas”, afirman. “Las reglas del juego tienen que ser iguales para todos productores”, han añadido.