Ha sido una semana de tener la calculadora en mano y echar cuentas para el Real Zaragoza, pero sólo una permanece en la previa del choque ante el Castellón. La escuadra dirigida por JIM sólo sellará su salvación en la categoría de plata del fútbol español si es capaz de imponerse al cuadro orellut, a partir de las 21.30 horas en el Estadio Municipal de La Romareda.
Una empresa que no se antoja sencilla teniendo en cuenta que el rival todavía tiene más urgencias que los blanquillos, con 41 puntos en la clasificación, seis menos que el Real Zaragoza. De hecho, comenzarán el partido en puestos de descenso tras las victorias de Alcorcón y Logroñés este miércoles frente al Sabadell y al Fuenlabrada respectivamente. Es decir, que están obligados a salir a por todas.
Durante la semana, diversas cuentas beneficiaban al Real Zaragoza en caso de empate, pero los últimos resultados han eliminado esa posibilidad. Porque igualar ante el Castellón supondría que el golaveraje favoreciera a los orellut, y todavía tendrían seis puntos por delante para tratar de alcanzar a los maños.
Para el choque, la novedad de la convocatoria es la entrada de Pichu Atienza, mucho tiempo después, en detrimento del sancionado Jair. Siguen fuera tanto Adrián González, lesionado muscularmente, como Álex Alegría, que se mantiene aislado por haber estado en contacto con un positivo en Covid-19.
Hasta ahora los números de JIM, especialmente en La Romareda, son impecables. Por lo que a eso se aferra el Real Zaragoza, que tras ganar a Las Palmas en Gran Canaria ve ahora más cerca que nunca lo que en su día pareció tan lejano: atar la permanencia y pensar cuanto antes en un futuro que, necesariamente, debe emerger con menos sufrimiento.