El calendario presiona a un Real Zaragoza que debe configurar la plantilla

JIM debe liderar el nuevo proyecto. Foto: Real Zaragoza
photo_camera JIM debe liderar el nuevo proyecto. Foto: Real Zaragoza

A punto de entrar en el mes de julio, el Real Zaragoza sigue sumido en un largo proceso de cambio accionarial. El fondo Spain Football Capital todavía no ha ejecutado la compra del club y, mientras tanto, el conjunto blanquillo no sabe cuáles son las condiciones en las que llega al mercado. Por otra parte, la entrada en julio limita los tiempos, porque apenas queda un mes y medio para el comienzo de temporada.

Lo que juega en favor del conjunto zaragozano es la Eurocopa. El movimiento de los clubes más poderosos se ralentiza en esta circunstancia, porque esperan a su finalización para hacer las operaciones. Muchos jugadores suben de precio debido a su actuación en el torneo de selecciones, y este hecho obliga a esperar.

Eso sí, hay otras plantillas que ya han comenzado a reforzarse. Tener paralizada la venta del club está influyendo en una planificación que se retrasa. Ni siquiera se ha podido ejecutar la operación de Peybernes ni la de Sanabria, que eran dos prioridades cuando finalizó la pasada campaña. Tampoco las salidas de Vuckic y Larrazábal, dos jugadores claves para liberar masa salarial.

Por lo tanto, el trabajo que le espera al director deportivo, Miguel Torrecilla, es serio. Especialmente porque no se esperan movimientos en un periodo corto de tiempo en cuanto a la estructura deportiva se refiere. Y a la Eurocopa aun le faltan varios días, porque está prevista su conclusión para el 11 de julio.

En definitiva, el conjunto zaragocista se encuentra sumido en la espera de una operación de compra que lleva varias semanas sin ejecutarse y del fin de la Eurocopa. Una para conocer las disponibilidades económicas y otra para que comience de verdad el baile de mercado. Paralelamente, la pretemporada zaragocista comienza el 7 de julio, y comenzarán a trazarse las líneas de la nueva campaña.