Fingían ser de una parroquia para ganarse la confianza de octogenarios y luego desvalijar su casa

Imágenes de una cámara de seguridad de una de las detenidas engañando a un anciano
photo_camera Imágenes de una cámara de seguridad de una de las detenidas engañando a un anciano

Agentes de la Jefatura Superior de Policía de Aragón detuvieron el pasado martes a dos mujeres de 38 y 35 años por robar a varios octogenarios en sus propias viviendas. Estas dos individuas fingían ser de una ONG para ganarse la confianza de los ancianos y, mientras una pedía un vaso de agua, la otra aprovechaba para saquear la vivienda.

Esta operación fue llevada a cabo por el grupo de Hurtos de la Brigada Regional de Policía Judicial quien investigaba los hechos desde el pasado mes de enero, momento en el que se formuló la primera de las seis denuncias que se imputan a las presuntas autoras.

El martes 21 de septiembre se producía la detención de la primera mujer, de 38 años, a quien se había identificado previamente y que fue localizada en torno a las 11.30 horas en el barrio de Torrero. La segunda de las detenciones tuvo lugar el lunes 4 de octubre, cuando se localizó a la otra presunta autora, que había estado en paradero desconocido con la intención de eludir a la Justicia. La detención se produjo en la calle sobre las 10.15 horas también en el barrio de Torrero, donde ambas tenían sus domicilios.

Pedían un vaso de agua para que la otra entrara a robar

En cada uno de los hechos imputados las detenidas utilizaban el mismo modus operandi. En primer lugar, elegían a su víctima, que en todos los casos investigados superaban los ochenta años. Una vez que tenían a la futura víctima del delito le abordaban en la entrada del portal de la finca o bien directamente en el rellano de su escalera, a quien le hacían creer que eran voluntarias o bien de la parroquia o de una ONG y les ofrecían servicios sociales tales como acompañamiento o labores del hogar.

Con la confianza de los octogenarios ganada, una de las mujeres accedía el inmueble de la víctima, a quien entretenía con largas conversaciones para seguidamente pedirle un vaso de agua, con la única intención de dirigirse hasta la cocina para así dejar el resto de las estancias de la casa vacías.

En ese momento entraba en la casa la segunda de las mujeres, a quien previamente le había dejado su acompañante la puerta entreabierta y aprovechaba que el morador se encontraba con la otra de las detenidas en la cocina para acceder a las diferentes estancias de la casa, llevando consigo el dinero o las joyas que hallaba.

Entre los seis hechos consumados, las detenidas se hicieron con un botín de más de dos mil euros en efectivo y diferentes joyas. Ambas mujeres fueron detenidas como presuntas autoras de varios delitos de hurto, allanamiento de morada y quebrantamiento de condena.
Las detenidas quedaron en libertad tras ser oídas en declaración en el Juzgado de Instrucción en funciones de guardia y con esta última reseña, suman más de cuarenta antecedentes policiales, ocho en lo que va de 2021.