El Tribunal Administrativo de Contratos de Aragón ha avalado hoy la continuidad del proceso de contratación del nuevo contrato de limpieza pública y recogida de residuos de la ciudad de Zaragoza que fue recurrido ante este órgano por la portavoz municipal del Partido Socialista, Lola Ranera, y por una empresa de reciclado de aceite.
El Tacpa ha desestimado las principales pretensiones de estos dos recursos, razón por la que la licitación continuará con un único lote y con todas las mejoras planteadas desde el punto de vista del material y del personal.
La resolución del tribunal llega cuatro meses después de la presentación de los recursos y, a pesar de los retrasos acumulados, el Gobierno de Zaragoza ha anunciado que intensificará los trabajos técnicos de valoración para recuperar el tiempo perdido.
En este sentido, la prioridad es que el nuevo contrato se pueda poner en marcha cuanto antes tras el trabajo realizado por los servicios municipales de Limpieza y Contratación.
La consejera de Presidencia, Hacienda e Interior, María Navarro, y la consejera de Servicios Públicos y Movilidad, Natalia Chueca, se han felicitado por la “buena noticia” y han insistido en que “a pesar de los intentos permanentes de poner palos en la gestión municipal y de trocear en lotes el servicio, la continuidad de este contrato en los términos planteados inicialmente es la garantía de que los zaragozanos tendrán pronto una ciudad más limpia con un único lote como planteaban los técnicos municipales y los trabajadores del servicio”.
Pliegos avalados por el Tacpa
Los pliegos de condiciones avalados por el Tacpa valoran el servicio en 743.528.659 euros para los próximos diez años y permitirá modernizar el servicio con la introducción de nuevas tecnologías más eficientes y respetuosas con el medio ambiente, pero también reforzar buena parte de los programas que fueron reducidos en 2012. Así, contemplan un incremento de la limpieza durante los fines de semana y festivos (48% más de operarios pasando de 134 a 199), dos planes de limpieza intensivos anuales para cada barrio, el tratamiento específico para zonas de botellones, un refuerzo de la limpieza en el entorno de los contenedores y un incremento de los medios para la retirada de excrementos en la vía pública.
El contrato plantea la incorporación de vehículos eléctricos o de gas (con 57 puntos de recarga para eléctricos y la construcción de una instalación de suministro de GNC) que medirán la huella de carbono y generarán menos ruidos a la hora de recoger la basura de los contenedores (especialmente en el caso del vidrio).
El número de camiones recolectores contemplados pasa de 56 a 64 (casi un 15% más), los vehículos lava contenedores pasarán de 6 a 8 (un 33% más), las barredoras en calzada crecen de 11 a 17 vehículos y las barredoras de aceras pasarán de 29 vehículos en la actualidad a 37 unidades.
La modernización del servicio permitirá además cambiar los contenedores de la ciudad, incorporando nuevas tecnologías con sensores que miden temperatura, el vuelco y el volumen. De este modo, se monitorizarán permanentemente todas las rutas de recogida a través de una plataforma de gestión integral, planificándolas de forma dinámica en función del llenado y ganando en eficiencia a través de la localización GPS de todos los camiones y vehículos.
Los medios disponibles para limpieza crecerán de forma notable incrementando los recursos materiales y personales, dado que se incorporan 16 triciclos eléctricos y 25 carros portacubos eléctricos, aumentarán un 100% los equipos de fregado de aceras pasando de 4 a 8, aumentan un 66% los equipos de baldeo manual pasando de 3 a 5 equipos; aumentan un 54% los equipos de barrido mecánico de calzadas y un 27,5% los de aceras.
Los equipos de limpieza de zonas de contenedores crecerán un 33%, dado que se incorporan 2 nuevos equipos de desbroce de viables, se incorporan ocho equipos más de prerrecogida en el turno de tarde para asegurar el repaso de las zonas de aportación del casco urbano.
Una de las principales novedades es la implantación de la recogida de materia orgánica en toda la ciudad con la extensión del contenedor marrón y el aumento del 100% en los equipos de recogida de grandes productores de orgánica. Esta apuesta por la economía circular permitirá avanzar en los objetivos de reciclaje de Zaragoza, que ya es la primera gran ciudad en reciclar más del 50% de los residuos que genera. Los contendores de materia orgánica permanecerán cerrados con cerradura electrónica y se prevé su apertura, cuando la tecnología lo permita, con tarjeta ciudadana o incluso con móvil.
Los contenedores de resto aumentarán hasta 3.850, los de envases ligeros serán 2.100 frente a los 2.000 actuales, los contenedores de papel cartón pasarán de 1.800 a 2.100 y los de vidrio de 1.780 a 2.100 contenedores.
Además, aumentarán casi un 40% los contenedores de 1.000 litros pasando de 1.079 a 1.400, se adquirirán 5.000 contenedores de 240 litros y 600 contenedores de 120 litros. El 76% de las papeleras se renovarán (hay más de 9.200) y está previsto instalar 15 nuevas papeleras compactadoras inteligentes que funcionarán con energía solar.
El pliego de condiciones también incluye un nuevo servicio de recogida de residuos voluminosos que se gestionará de la mano de entidades sociales y también se incorpora un nuevo servicio de recogida de aceite usado.
Una de las novedades más importantes de este contrato es la reducción de los costes vinculados al beneficio industrial y a los gastos generales que se imputan al Ayuntamiento de Zaragoza por parte de las empresas reduciéndose de un 6% a un 3% en ambos casos, lo que permitirá ahorrar decenas de millones de euros a lo largo de la vida del contrato.
El PSOE asegura que el Tacpa ha estimado las demandas de su partido
La portavoz del PSOE, Lola Ranera, ha asegurado que el Tacpa si ha estimado las demandas de su grupo municipal a un recurso que buscaba resolver las dudas jurídicas en asuntos como la no división del contrato en lotes.
Ranera ha aclarado que en ningún caso querían bloquear el contrato tal y como les ha acusado el equipo de gobierno. “Lo que estábamos era advirtiendo de que estos pliegos estaban mal hechos, que no eran los más ventajosos para la ciudad y que eran los más importantes en cuanto a su cuantía”, ha sostenido.
La edil socialista ha explicado que el PSOE había planteado “que estén bien hechos y se ajusten a legalidad porque eso garantiza una seguridad jurídica” y ha añadido que seguirán “vigilantes” para que el equipo de gobierno “haga los pliegos bien siempre”.