Waczynski relega al final de la temporada su futuro con el Casademont Zaragoza

Adam Waczynski, durante el partido ante Unicaja. Foto: Basket Zaragoza
photo_camera Adam Waczynski, durante el partido ante Unicaja. Foto: Basket Zaragoza
Hay un hombre que está brillando con luz propia esta temporada con el Casademont Zaragoza. Se trata de Adam Waczynski, que llegó al conjunto zaragozano “de rebote” tras la lesión de Santi Yusta. Ahora se ha erigido como un pilar fundamental, y aunque acaba contrato al final de esta campaña, no quiere pensar “más allá”. En Zaragoza se encuentra a gusto, pero no va a dedicarle tiempo a lo que pueda suceder, sino que se centra en jugar. Por ello, su renovación o su salida la relega al final de la temporada. La llegada de Waczynski la fraguó Pep Cargol, que ha quedado dejado atrás su puesto como director deportivo. Por ello, tras su salida, la negociación por su renovación será tarea de Toni Muedra, pero todavía no han llegado esos acercamientos. En palabras del jugador, considera que puede “no ser bueno” mirar a largo plazo, por lo que se centra en el día a día. Concretamente, la vista la tiene puesta en el próximo partido, ante Baxi Manresa, un duelo vital para sacar la cabeza de la zona baja. Su contrato es hasta final de temporada, y hasta entonces quiere dar “todo” en la cancha y “que todo el mundo esté contento en Zaragoza”. “Ese es mi reto. Pensar en más adelante a veces es bueno, pero no en una carrera deportiva. A final de temporada nos sentaremos y veremos las posibilidades”, ha afirmado en su comparecencia en la sala de prensa. Por otra parte, a pesar de la marcha de Pep Cargol, se encuentran trabajando como siempre. Considera que es una decisión tomada por el bien del club, pero ha querido agradecer “todo el trabajo de Pep en sus años en Zaragoza”. “Él me ha traído aquí y estoy muy contento. Nuestro trabajo es en la cancha y estamos trabajando en el próximo partido ante Manresa”, ha destacado. A Manresa lo ha definido como “un gran equipo que ha hecho buen trabajo con los fichajes”. Están preparados para “un duelo duro”, y tienen que aprovechar este partido “para mejorar y seguir como en el partido ante Unicaja”. Será importante “no bajar la cabeza y no perder balones”, porque las pérdidas “pueden matar el partido”. Waczynski también ha afirmado que el equipo piensa en cada partido “como si fuera el último”. Mira a la zona alta de la tabla, a pesar de que por abajo vienen apretando los equipos, y que todos se quieren salvar. Por lo tanto, el triunfo es vital para dejar atrás la zona baja y tratar de reengancharse a los equipos de cabeza.