Sean Kilpatrick ya se ha vestido con la camiseta de Casademont Zaragoza y ha lanzado sus primeras declaraciones en su presentación oficial. Según ha señalado, espera disputar sus primeros minutos ante el Burgos, y lo hace con gran ilusión. “Espero jugar ante el Burgos. Es algo que quiero hacer y, si también quiere el coach, lo estoy deseando”, ha declarado el escolta.
Enfrente se encontrará un cuadro que pelea exactamente por lo mismo que los rojillos: eludir el descenso. Con un partido menos, se encuentran a una victoria del cuadro zaragozano, y la victoria es ineludible. “Respeto mucho al rival, es un buen equipo”, ha destacado de sus contrincantes. Además, deben ser conscientes de que se debe competir “en los momentos buenos y malos”, porque los partidos “son muy largos” y tienen muchas fases.
A pesar de haber contado con pocos minutos en lo que se lleva de 2022, se siente “muy bien”. Ha estado entrenando por su cuenta, y a pesar de haber pasado el covid y una lesión, está “en forma”. Y en la cancha apuesta por “ser uno mismo”. “Llevo muchos años de profesional y voy a continuar así. En la ACB ya me conocen, intentaré dar puntos y todo lo que pueda siendo yo mismo”, ha declarado.
Lo más importante en el equipo “es estar juntos, mejorando, entrenando y jugando”. Se trata de “ganar el mayor número de partidos posible, pero sobre todo estar juntos y seguir peleando”. Ha hablado también con Stan Okoye, que le ha hablado muy bien “de la ciudad y de la afición”. Eso lo ha podido corroborar de primera mano, porque sus compañeros y el staff le hacen sentir “como si llevase dos o tres meses en el equipo, como en casa”.
Ahora piensa en estrenarse con victoria, lo más importante. Al entrenador, Dragan Sakota, no lo conocía, pero sí que había trabajado con amigos suyos. Su principal virtud, según Kilpatrick, es que sabe dónde poner a los jugadores “para conseguir lo mejor de ellos”. Es vital hacerlo este fin de semana y aferrar la permanencia cuanto antes.