El colectivo LGTBI vuelve a la calle en un Orgullo que pide transformar y avanzar

Las asociaciones presumen de unión de cara al Orgullo 2022. FOTO: Laura Trives
photo_camera Las asociaciones presumen de unión de cara al Orgullo 2022. FOTO: Laura Trives
Unidad, transformación y avanzar mirando a la igualdad. El colectivo LGTBI de Zaragoza vuelve este martes, 28 de junio, al centro de la capital aragonesa a reivindicar sus derechos y libertades en la celebración del Día del Orgullo. Una nueva cita, con la que esperan hacer llegar su mensaje a toda la sociedad, que volverá a contar con la ya típica mezcla de reivindicación y diversión. La jornada arrancará a las 20.00 horas de la puerta del Paraninfo de la Universidad de Zaragoza. El escrito, titulado “Transformar es avanzar”, recoge la intención de todo el colectivo de lograr la conquista de nuevos derechos, así como la exigencia del fin de la violencia y el avance de la Ley Trans, paralizada desde hace un año en el Consejo de Ministros. En la presentación de la gran jornada LGTBI los representantes del colectivo han asegurado la unidad que existe entre las distintas asociaciones zaragozanas. La gran mayoría ha participado, en común, en la organización de este nuevo Día del Orgullo así como en la redacción del manifiesto, que será leído en la Plaza del Pilar por varios representantes. Tras el fin de la manifestación, el Mercado Central se abre a todos los participantes y simpatizantes para un ágape, como fin de fiesta.

La manifestación LGTBI de 2022

Leticia Ojeda, técnico de igualdad de Somos, ha sido la encargada de presentar el manifiesto, que asegura que “todos los días transformamos con nuestros actos”. Un escrito que anima a “ocupar el espacio público que nos quieren robar” y menciona a aquellos que van contra sus derechos como “escombros de la historia”. El texto exige, de nuevo, la rápida tramitación de la Ley Trans y pide “avanzar hacia una sociedad más libre y sin prejuicios”. La manifestación de este 2022 volverá a contar con varias actuaciones y grupos musicales que dinamizarán una jornada que no se olvidará de la reivindicación. El acto, en el que se lleva trabajando meses desde las distintas asociaciones, estará dividido por bloques. “Tras la pancarta de apertura, la cabecera la llevarán miembros de la asamblea 28J”, ha explicado Sandra González, presidenta de Magenta, en una muestra más de unión de todas las organizaciones. Tras ellos, una primera batucada marcará el ritmo de la marcha, seguida inmediatamente después por el resto de las entidades y de los participantes. Un nuevo grupo musical dividirá a los manifestantes de los distintos representantes políticos, que cerrarán la marcha. “Queremos que el mensaje quede por encima del logo de cualquier asociación”, ha sentenciado González, que ha adelantado que se ha solicitado la iluminación del Palacio de la Aljafería con la bandera del arcoíris.

El aumento de la violencia contra el colectivo

El crecimiento de las agresiones en el entorno de la calle Fita, zona de bares LGTBI, ha sido otro de los puntos comentados en la presentación del Orgullo. Una situación que marcó el inicio del 2022 que se resolvió con “la colaboración junto a la Policía Nacional”, según ha explicado González. La presidenta de Magenta también ha asegurado que este tipo de actos violento “son difíciles de cuantificar porque muy pocos se denuncian, por lo que falla el dato real”. Una situación a la que se quiere poner fin, ya que las asociaciones LGTBI tienen un servicio propio para ayudar a las víctimas. “Solo el 10 por ciento de las agresiones a miembros del colectivo se denuncia, aunque son las segundas que más se producen por odio”, han certificado las representantes de las asociaciones. Ese ranking lo lideran las agresiones por motivos racistas. Las asociaciones han confirmado que la pancarta por el Día del Orgullo volverá a lucir en el Ayuntamiento de Zaragoza y que, por ahora, no se ha recibido ningún tipo de denuncia para que este hecho no se haga posible. También ha habido un momento de recuero a las víctimas del ataque homófobo en Oslo el pasado fin de semana, “una muestra más del terrorismo que sufrimos, que nos deja como una población diana para las agresiones de odio”.