El juez decretó este sábado prisión provisional para un joven de 20 años con un largo historial de robos violentos en la ciudad de Zaragoza. El viernes cometió el último en el barrio de las Delicias cuando arrancó del cuello un collar de oro valorado en 2.000 euros a un hombre. Minutos antes ya había intentado llevarse un móvil reventando una botella de vidrio en la cabeza a su legítimo dueño.
Estos dos últimos robos se cometieron sobre las 00.00 horas del ya sábado y las dos víctimas acudieron a la vez a un coche de la Policía Nacional, que había sido requerido por varios testigos en la calle San Antonio Abad de las Delicias de Zaragoza. Una vez allí, las víctimas facilitaron los rasgos de los dos autores, dos jóvenes de 20 años magrebíes. La coincidencia apareció cuando se descubrió que estos dos jóvenes, por los rasgos facilitados, ya habían sido identificados dos horas antes en la avenida de Navarra, sin haberles encontrado nada, por otro presunto robo cometido dos horas antes.
Tras el robo de la cadena de oro, los agentes atrapan a uno de los ladrones cerca de donde se cometió. La cadena no apareció. Este joven no posee antecedentes. Sin embargo, el otro autor, el joven con un largo historial de antecedentes, desapareció. Y otra vez la coincidencia. La Policía recibió una llamada de una pelea en un locutorio de la calle San Pablo del Gancho, y uno de los implicados era este joven.
Este individuo acumula 14 antecedentes por robo y el juez este sábado a la tarde decretó su ingreso en prisión provisional. Además, este mismo joven fue detenido esta última semana tras intentar robar un móvil y un reloj y su propietario acabó también arrestado por pegarle una paliza y por “tomarse la justicia por su mano”.