“Tarde o temprano deberá haber un acuerdo político entre PP y PSOE para mejorar esta situación”. Es el llamamiento conjunto que han realizado este jueves los presidentes de Aragón y Andalucía, Javier Lambán y Juanma Moreno, para lograr un pacto global entre los dos principales partidos del país para reformar el sistema de financiación autonómica, ante la necesidad “acuciante” de inyectar más recursos a las comunidades.
Así, ambos líderes, pese a las diferencias de criterios que siempre han expuesto para lograr un nuevo acuerdo, han mostrado su preocupación por la “infrafinanciación” que, aseguran, sufren todas las comunidades autónomas para hacer frente a los “tres pilares del Estado de Bienestar” que tienen el deber de gestionar, como son la sanidad, educación y dependencia. “Se ha multiplicado el gasto sanitario como consecuencia del aumento de la esperanza de vida, del envejecimiento de la población, más acusado en otras comunidades, y el avance de la tecnología y fármacos. El gasto se ha multiplicado de forma exponencial”, ha señalado Moreno.
No obstante, los dos presidentes han reconocido a su vez que no se entra en una época, a ocho meses de elecciones municipales y autonómicas, que propicie un acuerdo y unas negociaciones de tal magnitud. “No veo el momento político propicio. A ocho meses de elecciones en todo el país no creo que sea le momento de llegar a un acuerdo. Hay una excitación política que no lo hace adecuado”, ha remarcado el líder andaluz, que ha cifrado en 16.000 millones de euros la cantidad que necesitan el conjunto de las comunidades.
Este asunto, como ha recordado Lambán, lleva sobre la mesa desde 2014, incluso con una conferencia de presidentes encabezada por Mariano Rajoy donde fue prácticamente el tema central. “Cada vez es más acuciante la necesidad de un nuevo modelo porque los pilares del Estado de bienestar nos emplazan a presupuestos sin margen para la inversión, y a no mucho tardar, ni para financiar los servicios públicos básicos”, ha advertido el presidente aragonés.
FISCALIDAD
Paralelamente, el máximo responsable de la DGA busca un acuerdo con la oposición para adecuar el marco fiscal de la Comunidad a la nueva realidad económica y ayudar a los más vulnerables a hacer frente a la despoblación. El PP ha propuesto una rebaja en los cuatro primeros tramos del IRPF hasta los 34.000 euros y deflactar hasta los 60.000, mientras que Ciudadanos ha incidido también en el Impuesto de Patrimonio y el IMAR, el sustituto del ICA. “Nuestra idea es ver hasta dónde puede dar de sí y si se puede hacer algún replanteamiento en la fiscalidad vigente. Hasta que ese proceso termine ni es bueno que se sepa cómo transcurren las conversaciones ni existe un final”, ha manifestado.