Vox aprobará una Ley Nacional de Educación «duradera» y «lejos del sectarismo y la imposición ideológica radical que han permitido y promovido los partidos del consenso progre», tal como ha reconocido el candidato del partido al Congreso por Zaragoza, Pedro Fernández junto a los números dos y tres, Carlos Luis Falcón y Marta Isabel Hormaechea y la diputada de las Cortes de Aragón, Carmen Rouco a las puertas del colegio Cesáreo Alierta de Zaragoza. Lo hará para «acabar con diecisiete modelos educativos diferentes, en algunos casos excluyentes entre sí, que han dinamitado la igualdad de oportunidades en todo el territorio nacional y han permitido el adoctrinamiento separatista en algunas regiones«, han asegurado.
Como paso previo y «de acuerdo con la propuesta política de España Decide», «se consultará al pueblo español mediante la aplicación del artículo 92 de la Constitución Española, relativo a consultas sobre decisiones políticas de especial trascendencia, su voluntad sobre el regreso de las competencias educativas al Estado», han explicado.
Fernández también ha reconocido que «el Gobierno de Pedro Sánchez ha dado la puntilla a la degradación que lleva sufriendo la enseñanza en España en las últimas décadas a causa del estado autonómico, el adoctrinamiento ideológico en colegios y universidades, y las sucesivas leyes educativas, que han dejado de impulsar la excelencia y la calidad».
UNA ÚNICA PRUEBA DE ACCESO A LA UNIVERSIDAD
Desde la formación han afirmado que implantarán una prueba única de acceso a la Universidad en todo el territorio nacional. «También exámenes de evaluación de ámbito nacional en distintas etapas educativas que aseguren la asimilación de contenidos básicos en el conjunto de España».
Asimismo, y para «seguir hablando de lo que importa», Vox defiende que los hijos «no son del Estado ni de los organismos supranacionales sino de sus padres» y por ello van a «recuperar la legítima autoridad de los padres y su protagonismo en la educación de sus hijos, empezando por garantizar el conocimiento previo y aceptación de los padres de cualquier contenido afectivo-sexual o ideológico que puedan recibir sus hijos en el aula».
De la misma manera, «blindarán» la «libre elección de centro educativo en todos los niveles a través de un cheque escolar para que las familias elijan libremente el modelo educativo que desean, sin que su situación económica o social sea un impedimento para ello», ha reconocido Fernández explicando que también se trabajará en «impulsar la recuperación del prestigio y la autoridad del profesorado, reflejada tanto en sus condiciones laborales como en el respeto dentro del aula. Para ello, el sistema de acceso a la función pública docente tendrá carácter nacional y asegurará la igualdad y excelencia del personal docente mediante procesos de selección según el mérito y la capacidad».
Por último, ha añadido que se «ampliará el sistema de apoyo a las familias para la educación de sus hijos con medidas fiscales en función del número de hijos para el comedor y transporte escolar, materiales, uniforme o actividades extraescolares y se fomentarán igualmente medidas de conciliación familiar y laboral».
Así, desde la formación también defenderán «los centros de educación diferenciada, garantizando su accesibilidad y potenciando la figura de los educadores especiales en todas las escuelas e institutos, así como la Formación Profesional adaptada a las necesidades de los alumnos» y rescatarán «a la Universidad de todas las imposiciones ideológicas totalitarias y su cultura de la cancelación, recuperando su vocación como espacio de libertad y búsqueda de la verdad y la belleza. Y garantizaremos, finalmente, la libertad de cátedra de los profesores en las aulas frente a las imposiciones de la corrección política», ha culminado.