El presidente del Gobierno de Aragón, Jorge Azcón, ha confirmado en los micrófonos de Radio Zaragoza que no cesará a los dos directores generales de Vox acusados de hacer apología del franquismo en sus redes sociales. En sus declaraciones en La Rebotica este mismo lunes por la mañana, Azcón ha calificado el episodio de «desafortunado» pero en ningún caso se plantea el cese, sino que juzgará a la responsable de Justicia, Esmeralda Pastor, y al de Caza y Pesca, Jorge Valero, por lo que suceda «a partir de ahora».
«Esta es una nueva etapa y no los he elegido por lo que han hecho en el pasado«, ha recordado el nuevo presidente, que se ha referido también al debate de investidura y las declaraciones del portavoz de Podemos, Andoni Corrales: «Empezó llamándome nazi».
A lo largo del fin de semana, la polémica con la que arranca el curso político en la Comunidad ha crecido hasta alcanzar dimensión nacional. El propio Pedro Sánchez se hizo eco en un acto del PSOE y previamente el resto de grupos de la oposición pidieron a Azcón que relevara a estos dos cargos, que forman parte de las consejerías de Despoblación y Justicia, y Agricultura y Ganadería, respectivamente.
En respuesta a Sánchez y el resto de socialistas que salieron al paso, como la ministra de Educación en funciones, la aragonesa Pilar Alegría, les ha acusado de usar la polémica como un juego «partidista», al tiempo que ha afeado sus «pactos con los independentistas y los separatistas». En el caso de Pastor, una vez salió a la luz lo sucedido borró su foto junto a la bandera franquista y el resto de publicaciones donde ensalzaba la figura del dictador. Por su parte, Valero, como se supo horas después por el diputado aragonés de Sumar, Jorge Pueyo, compartió otras en las que ocurría lo propio con el fundador de la Legión, José Millán-Astray.
EL INICIO DEL CURSO
Al margen de la polvareda del fin de semana, el líder de los populares aragoneses ha sobrevolado el resto de asuntos que marcan el inicio del curso político. Así las cosas, está en marcha la elaboración de los presupuestos para 2024, en los que espera poder introducir las medidas impositivas relativas al IRPF. Es una forma, ha dicho Azcón, de «ajustar» la fiscalidad aragonesa al resto del territorio español.
De fondo, continúa el debate sobre la financiación autonómica, y es que ha confirmado que pedirán al nuevo Ejecutivo central «un fondo específico» que solvente este «problema» hasta que se pueda llevar a cabo una reforma desde el Estado. En materia sanitaria, se ha referido de nuevo a la modificación del pliego del transporte sanitario urgente. Una medida que estirarán «al máximo de la legalidad», ya que el coste de eliminar el contrato con Ambulancias Tenorio e Hijos heredado del cuatripartito sería muy alto.
Como cuestiones candentes, el pacto de Gobierno con Vox incluye también la derogación de la Ley de Memoria Democrática y la modificación de la conocida como Ley Trans aragonesa. De acuerdo a Azcón, no hay plazos concretos.