75 días tardó Jorge Azcón en lograr los apoyos de Vox y tomar posesión como presidente de Aragón -el que más de la historia democrática de la Comunidad- y 100 días se cumplirán este domingo desde aquella primera entrada del líder del PP en el despacho presidencial del Edificio Pignatelli. Un periodo de “cortesía” del que tanto Azcón como su vicepresidente, Alejandro Nolasco, se han mostrado “razonablemente satisfechos” por la unión mostrada y por las inversiones que han materializado en este tiempo.
En este sentido, y huyendo de cuestiones más espinosas como la polémica de los directores generales o la amenaza de Abascal de romper las coaliciones si el PP no frenaba la Ley de Amnistía en el Senado, Azcón ha destacado como grandes hitos, en primer lugar, la ampliación del pliego del transporte sanitario urgente, por el cual, defiende, “las ambulancias volverán a prestar servicio en los municipios las 24 horas al día”. “No era defendible que cuando una persona se pusiera enferma o sufriera un accidente, no tuviera una ambulancia para llevarla a un centro de salud”, ha afirmado.
Asimismo, ha valorado los incrementos presupuestarios por encima del 10% en Educación, Sanidad y Bienestar Social, fruto de un techo de gasto récord de 7.500 millones de euros, o las dotaciones de 45 millones para listas de espera, 16 millones a la nueva Dirección General de Salud Mental, 75 en el Plan Pirineos, los 40 comprometidos a la nueva Romareda o las ayudas a municipios. “Hemos incrementado el Fondo Aragonés de Financiación Municipal porque los pequeños problemas de todos los pueblos se solucionan en los ayuntamientos”, ha remarcado el presidente aragonés.
Del mismo modo, Azcón ha reivindicado su primera batería de medidas fiscales para, asegura, “beneficiar a todos los aragoneses”, con la deflactación del 5% del IRPF, la bonificación de Sucesiones al 99% para hijos menores de 21 años, la exención de 500.000 en Donaciones a familiares de primer grado o el aumento del mínimo de Patrimonio a 700.000 euros. “Vamos a ahorrar a los aragoneses 52 millones de euros que estarán en el bolsillo de los aragoneses en una época inflacionista donde es especialmente necesario. Aragón debe dejar de ser un infierno fiscal y hemos empezado un camino en el que profundizaremos durante cuatro años”, ha avanzado.
Mientras, el presidente aragonés sigue confiando en el compromiso del ministro de Industria, Héctor Gómez, de implicarse al “220%” con la fábrica de baterías de Stellantis, pese a que el propio Azcón también quedó insatisfecho de los 55,8 millones de euros que Moncloa asignó a la multinacional para su proyecto en Figueruelas. “Nos hubiera gustado que el Perte hubiera otorgado mayores cuantías económicas. Otras han obtenido más de 200. Nos gustaría que a Aragón se le tratara en igualdad a otras comunidades que también aspiran a implantar una fábrica de baterías. Quiero confiar en ello”, ha aseverado.
JUSTICIA Y DESPOBLACIÓN, LA LABOR DE VOX
En una línea similar, Nolasco ha destacado el “buen clima de trabajo” después de cien días “frenéticos” que dan inicio a cuatro años “que serán muy fructíferos”, mantiene el vicepresidente primero. En su lucha contra la despoblación, volverá a viajar el próximo lunes a Bruselas para reclamar, entre otros asuntos, que se considere a Aragón como una comunidad “en gravísimo riesgo demográfico” o la posibilidad de acogerse a un régimen fiscal diferenciado en zonas periféricas como Canarias. “Los datos de Zaragoza distorsionan el drama de Aragón”, ha expuesto.
Por ello, Nolasco ha sacado pecho de haber “multiplicado por seis” la cuantía del Fondo de Cohesión Territorial hasta los 19 millones de euros, los cuatro millones del Fihuzar o las ayudas a la adquisición de vivienda para jóvenes en municipios de menos de 5.000 habitantes. Asimismo, ha prometido que Aragón será un “dique de contención” contra el “expansionismo catalanista”, iniciando un plan para delimitar “al milímetro” las fronteras de la Comunidad.
Además, en el área de Justicia, ha “alabado” la gestión de la directora general, Esmeralda Pastor, en el ojo del huracán durante estos cien días por su foto con la bandera franquista, con la creación de un nuevo Juzgado de Instrucción en Zaragoza o el incremento del 7% en la partida del turno de oficio. “Me gustaría que fuera más, pero saben que el presupuesto es ajustado para aumentar este servicio tan importante”, ha reseñado Nolasco.
“LEALTAD INSTITUCIONAL” CON EL ESTADO, PERO “NO NOS VAMOS A CALLAR”
Cien días de Gobierno que terminan, ha descrito Nolasco, “con la peor noticia posible”, la investidura de Pedro Sánchez de la mano de formaciones que “se caracterizan por su odio a España y que chantajean al Estado”. “A más PSOE-Sumar en Moncloa, más perjudicado quedará Aragón. Vamos a defender hasta la extenuación la igualdad para todos los aragoneses”, ha sostenido el vicepresidente primero.
Al respecto, Azcón ha dejado claro que la relación con el Ejecutivo central partirá de la “lealtad institucional”, ya sea para hablar de la fábrica de baterías con el Ministerio de Industria o de impuestos con Hacienda, y más si “vienen a darnos buenas noticias”, pero sin que eso signifique “callar”. “Tenemos muy clara la responsabilidad y el papel institucional que deben tener las administraciones. Cuando venga un ministro a esta Comunidad, estaremos encantados de que colabore y traiga inversiones”, ha afirmado.
No obstante, el presidente aragonés ha asegurado que lo primero que hará la próxima vez que Pedro Sánchez visite la Comunidad será “decirle que no mienta” y que “no utilice a los aragoneses para los problemas que tenga con sus socios”. “Estamos indignados y realmente preocupados. No vamos a ser cómplices. No voy a ahorrar adjetivos. Vamos a defender la Constitución Española y no vamos a estar en el discurso de frentismos, divisiones y buenos contra malos”, ha añadido.