Si tradicionalmente las primeras rondas de la Copa del Rey han servido para probar jugadores del filial, esta vez parece que no será así en el Real Zaragoza. Este viernes, a dos días para el duelo, los maños no han contado con canteranos (salvo Rebollo) entrenando con el primer equipo en la Ciudad Deportiva. Todo apunta a que Fran Escribá, en su primer 11, echará mano de los más habituales para vencer al Diocesano.
El entrenamiento de este viernes, en césped artificial para adaptarse al campo de los extremeños, ha contado con el primer equipo íntegramente. Únicamente Iván Azón y Cristian Álvarez han quedado al margen de la sesión, ambos por sus respectivas lesiones que les impiden entrenar. Por lo demás, entrenamiento normal de un equipo que tiene que vencer para comenzar con buen pie tras el cambio de entrenador.
En la portería sí que tendrá que haber baile por la lesión de Cristian, y Rebollo o Ratón están ante la oportunidad de hacerse un hueco en la meta. Pero, aun así, Escribá ya afirmó que Ratón estaba preparado. Poco más en cuanto a modificaciones rotundas. A priori, los jugadores que se han visto hasta ahora en el Real Zaragoza serán los que compongan el equipo titular de los maños. Y, en cualquier caso, las modificaciones que pudiera haber apuntan a ser del primer equipo.
El Real Zaragoza necesita ganar su primer partido para comenzar con buen pie y no enfrentarse al Málaga de nuevo con dudas. Vencer al Diocesano, rival de lo más asequible al encontrarse en la parte baja de Segunda RFEF, es el primer paso. Será una pequeña pretemporada para un Escribá que asume su primer envite en el Real Zaragoza.
