Escribá quiere un jugador ofensivo y enseña a James la puerta de salida

El entrenador sonríe antes de saltar al césped de la Ciudad Deportiva
photo_camera Escribá ha sido cuestionado por varios nombres respecto a entradas y salidas

Apenas restan diez días para que el mercado de fichajes concluya en el fútbol español y el Real Zaragoza sigue necesitado de movimientos. Hasta el momento, la salida de Daniel Lasure y la incorporación de Tomás Alarcón son los cambios vividos en la plantilla maña, pero Escribá y Cordero quieren más. El primero ha pedido un futbolista ofensivo, mientras que ha admitido que habló con James Igbekeme sobre su salida.

El técnico ha explicado que está teniendo muchas reuniones con el director deportivo, Juan Carlos Cordero, para hablar de posibilidades dentro del plantel. Eso sí, recuerda que tienen las 25 fichas cubiertas y que el responsable de fichar “tiene previstas muchas cosas”. Sobre todo, tiene claro que “si dentro de unos días se ha ido algún jugador y ha venido otro es porque va a ser mejor”, descartando que se produzcan “cambios de cromos”.

Cuestionado sobre si la prioridad sería un extremo izquierdo, Escribá ha valorado que necesitan “algo más de desborde” porque atrás están “bien armados”. Por eso, apunta a que la idea es “firmar algo en ataque” porque no tienen “excesivo gol”. “Si tenemos una bala, me gustaría que fuera un jugador ofensivo, porque si no da un salto de calidad, no vale la pena”, ha corroborado.

Tres son los nombres principales que han emergido en la sala de prensa de cara a marcharse de la entidad. El que más pistas ha recibido es James Igbekeme. “Sé que el club ha hablado con los jugadores que podrían buscarse una solución”, ha comentado Escribá, admitiendo que fue “claro con James” al decirle que entrenaría con el grupo, pero “que la mejor solución es buscar una salida”.

Mientras, sobre Pape Gueye, el gran fiasco hasta el momento, ha manifestado que no tiene “ninguna información sobre revertir su cesión” y que sólo piensa en “que revierta su situación deportiva”. Al senegalés le ha lanzado el mensaje de que “debe poner más de su parte” porque si bien es un técnico que protege a los suyos, “son hombrecitos y deben asumir responsabilidades”.

El último nombre ha sido el de Jairo Quinteros, “al margen por una pequeña molestia por una bota, por precaución”, aunque ya de regreso a los entrenamientos. “Es verdad que está contando poco”, ha admitido Escribá, incidiendo en que “mientras no haya nada contamos con él”.