Rajada de Escribá en busca de la reacción del Real Zaragoza

El Real Zaragoza bordó el desastre en Málaga tras una derrota con cientos de dolorosas lecturas. Desde los siete tantos encajados en dos partidos hasta caer 3-0 frente a un equipo hundido y pasando por la calamitosa falta de gol. El entrenador blanquillo, Fran Escribá, entró caliente a la sala de prensa y abordó todas las cuestiones en busca de una reacción que pasa, en primer lugar, por un cambio de actitud. Y por empezar a competir.

Toque de atención nada más comenzar la rueda de prensa tras reconocer que su vestuario estaba “fastidiado”, aunque no lo suficiente. “Incluso, debe estar todavía más fastidiado de lo que está”, señaló el entrenador. El líder del vestuario tenía claro que, además de “mejorar, trabajar y el montón de cosas que se pueden decir”, tiene que “doler muchísimo”, porque “si no, no sirve”. Escribá estaba tan “caliente” que no quería hacer un análisis muy largo por temor a equivocarse.

El técnico del Real Zaragoza exigió a sus jugadores más. “Nos tiene que doler muchísimo, pero después del partido, que duela es poco. Nos tiene que doler durante el partido”, afirmó. Para el Málaga era una final; “¿y por qué para nosotros no?”, se preguntaba el míster, sabiendo que “todos los partidos son finales”. El que no lo contemple así “se equivoca”. Si solo se mira los futbolístico, hubo fases con buen juego en la primera mitad, e incluso pudieron adelantarse en ella, pero “al final te vas con la sensación de que no competimos”. Sin agresividad en las áreas no se va a ningún sitio y ese es un problema serio.

SIN CHOQUE

Escribá se fue de Málaga con la sensación de que su equipo no chocó “ni una vez”, y eso “es gravísimo”. Hay gente mayor que juega bien a futbol, “pero eso no es competir, es otra cosa”. “Hay que darse cuenta, yo el primero. A lo mejor tendré que hacer eso, saber que los 11 que compitan, no que jueguen bien, son los que tienen que jugar. A lo mejor elegí gente que juega mejor que otros, pero no competimos. Y si no competimos, esto no funciona”, valoró.

En dos partidos el Real Zaragoza ha encajado siete goles con apenas doce tiros a puerta, y el entrenador no recuerda paradas del arquero. Cristian “ha sido muy importante otras veces y otras temporadas”, pero no siente eso de encajar tres y pensar “menos mal que estaba Cristian”, porque no tocó “ni un balón”. Al cuadro blanquillo le hacen daño “con muy poquito”.

Tras el desastre en Málaga, asume su responsabilidad y se considera el primero que comete errores. “Si he sacado 16 jugadores, que no todos, pero unos cuantos no han competido, tengo mi culpa”, ha asegurado. “Cualquiera” puede tener claro que generando ocasiones iba a haber un ambiente raro “y en vez de acabar haciendo la ola iban a pitarles y a ponerles nerviosos”. “Hicimos cosas muy mal y hay que hacerlo ver. Lo cambiaremos. Digo esto ante la confianza en un grupo que ha competido en otras jornadas, pero llevamos dos que no hemos competido”, insistió el técnico del Real Zaragoza.

PERMANENCIA Y BASTA

“Si encima nos hace daño como para que nos entre el miedo, no merecemos esto”, declaró el míster. En cualquier caso, recuerda que en la jornada 30 se ven los verdaderos objetivos y cree en este caso “que está claro”. “Ojalá ganemos la semana que viene, la siguiente, nos volvamos a ilusionar… pero no. Nuestra realidad es está. Sobre todo si no competimos, somos un equipo para salvarse y ya esta”, afirmó. Sin querer hacerles mejores ni peores de lo que son, siendo consciente de la realidad del equipo, cree que podrá sacar rendimiento a la plantilla.

En una situación que se complica, Fran Escribá busca la reacción del Real Zaragoza para no pasar apuros. No ve lógico ni encajar siete goles en estos dos partidos ni anotar uno solo, y cree que hay plantilla para lograr el objetivo. Ese no es otro que el de la permanencia. Y para hacerlo, bajo ningún concepto se puede empatar o perder ante el Burgos. El giro es imprescindible y toca darlo en La Romareda.