Alarcón admite que no tiene los minutos que buscaba al llegar al Real Zaragoza

Alarcón posa en su presentación apoyado en un poste de La Romareda
photo_camera El chileno ocupa un papel mucho más secundario del esperado. Foto: Real Zaragoza

Llegó para ser imprescindible en el Real Zaragoza, o al menos para ser un hombre importante en la medular, y lo cierto es que poco a poco su participación se ha ido difuminando hasta ocupar un rol cuanto menos secundario. Es el caso de Tomás Alarcón, cedido del Cádiz, con vitola de futbolista con nivel de Primera División, y que ha hecho un ejercicio de sinceridad en la sala de prensa de la Ciudad Deportiva.

Al respecto, ha explicado que “cualquier futbolista quiere jugar”, recordando que aterrizó en la capital aragonesa “para sumar minutos” y que no está contando “con los que quería”. En este sentido, hubo un punto clave dentro de su corta trayectoria en la entidad blanquilla, la roja en Gijón nada más comenzar el choque, que provocó que saliera “del equipo titular y que entraran compañeros que lo hicieron muy bien”.

Por ello, está convencido de que está “dando lo mejor posible” y está “tranquilo”, aunque “lamentablemente no está alcanzando para jugar”. Hablando de expulsiones, en la mesa todavía la de Zapater en Huesca porque una acción así “te puede quitar dos puntos”, mostrándose en desacuerdo con la decisión arbitral y la posterior revisión del VAR.

En cuanto a su forma de juego, ha admitido que en Chile tenía “un volante fijo”, lo que le permitía sumarse al ataque con más asiduidad mientras que en Zaragoza es Francho el que adopta ese rol. “No es bueno que los dos lleguemos arriba”, ha admitido, añadiendo que eso provoca que no pueda dar su “mejor versión”.