¿Volverá Azón ante el Levante?

Azón aguanta la pelota ante el filial del Villarreal en La Romareda
photo_camera El nueve zaragocista apunta a regresar a una lista dos meses después. Foto: Real Zaragoza (Tino Gil)

30 de enero de 2023. Corría la primera parte de un Real Zaragoza – Ponferradina e Iván Azón volvía a decir basta por tercera vez durante esta temporada. Caía al suelo, moralmente hundido, sabedor de que se avecinaba un nuevo periodo en el dique seco. Dos meses después, llega el partido señalado en el calendario en rojo por todos: el del posible regreso del nueve zaragocista a una convocatoria.

El ariete ya se ejercita con el grupo desde hace días, quedándose fuera de la lista las dos últimas semanas por precaución. Nadie quiere una nueva recaída del hombre que estaba destinado a liderar la delantera zaragocista este año y que sólo las lesiones lo han impedido. Esta última muscular, que afecta a lo mental más allá de lo puramente físico, y que ha exigido un tratamiento específico para tratar de poner remedio al vía crucis particular de Azón con las lesiones.

Será el mismo jueves cuando su entrenador, Fran Escribá, dicte la lista de convocados para medirse al Levante en el Ciutat de Valencia. En principio, se ha señalado este encuentro a los cuatro vientos como su posible regreso, pero sólo en el momento en el que sea citado se acabará la duda. Por supuesto, su incorporación será paulatina, ya que una cuarta lesión echaría a perder completamente la temporada.

Hasta el momento, el delantero sólo ha podido estar sobre el verde 410 minutos repartidos a lo largo y ancho de diez partidos. En ellos, le ha dado tiempo a saborear las mieles del gol en dos ocasiones, incluso también a repartir una asistencia. Le echa de menos la afición, el entrenador y también sus compañeros, en especial un Giuliano Simeone que era la imagen viva de la frustración y desesperación aquel 30 de enero del que parece haber pasado un mundo.

Si no es en este, será en el siguiente. Pero nadie quiere correr el más mínimo riesgo y sí mimar a un futbolista del que se esperan grandes cosas en el Real Zaragoza. Y que aguarda como león enjaulado a poder salir a comerse el césped y demostrar que todavía quedan jornadas para demostrar que el número 9 le queda perfecto en su espalda.