Dar lo mejor y hacer feliz a la afición del Real Zaragoza, los objetivos de Grau

Jame Grau se prepara para hacer un ejercicio en la Ciudad Deportiva
photo_camera El centrocampista ha anotado tres goles como zaragocista

Un vídeo en los canales oficiales del Real Zaragoza ha servido para poner voz por segunda vez esta semana al vestuario blanquillo. Se ha tratado de Jaume Grau, quien ha asegurado en él que “siempre” se ha sentido identificado con el club, donde tiene ganas de dar “lo mejor” de sí mismo y “seguir cumpliendo objetivos”. Además, por supuesto, de que todo el mundo se sienta “orgulloso” de ir a ver al equipo.

Tras nueve partidos sin conocer la derrota se puede destacar “la importancia del grupo”, porque se trata de “mucho tiempo”. Durante este periodo “ha ido entrando y saliendo gente”, se ha rotado, y eso habla de “lo competitivo que es el equipo”. Ha habido mucho movimiento y se ha mantenido el nivel. Este tiempo ha sido clave Jaume, capaz de adaptarse a las peticiones del míster, Fran Escribá, y de entender su fútbol.

Considera, eso sí, que siempre “hay cosas que mejorar”, pero ahora y cuando vayan pasando los años. En aspectos de juego, de físico y técnicos es posible subir un escalón, pero también se muestra alegre por su lectura de juego “saber transmitir lo que necesita el equipo”. Ahora bien, ha ayudado armar un bloque sólido, es “positivo” mantenerlo. Puede hacer que el año que viene estén todos más preparados y consolidados.

LA FAMILIA, LEER, PASEAR E IR A PARQUES

En los cuatro minutos de contenido audiovisual también le ha dado tiempo a rememorar, por ejemplo, los goles que ha marcado, y las victorias que siempre han ayudado a lograr. Para él “es como si fuese de niños, la alegría más grande en el campo”, y apunta que “habrá que marcar alguno más”. Sobre sus aficiones, también las ha definido como “cosas normales”. “Cuando puedo, quedar a tomar algo, trabajar lo físico, cosillas como leer, me gusta mucho ir a parques, pasear, echarme en un césped, tomar algo con la familia…”, ha explicado.

Jaume cree que para un futbolista es “difícil” aislarse, pero con el tiempo y la madurez irá aprendiendo a desconectar y a no llevarse el trabajo a casa, algo que ahora le cuesta. En Zaragoza está “a gusto y feliz”, y ahora se trata de “ir a por los partidos, a por los tres puntos y quedar lo más arriba posible”.