El conjunto de Fran Escribá se llevó el choque liguero ante el Villarreal B por 2-0. Fotografía: LaLiga Hypermotion.

El Real Zaragoza se ha llevado el choque ante el Villarreal B (2-0) en su debut liguero. Los pupilos de Escribá fueron superiores a un filial valenciano que no se arrugó en ningún momento y que planteó un partido de tú a tú a los blanquillos. Los goles de Mesa y Francho fueron suficientes para que el club del león sumara sus primeros tres puntos ante una Romareda que estaba a hasta la bandera.

Fran Escribá apostaba por una 4-4-2 en rombo como ya había exhibido en varios partidos de pretemporada. Cristián Álvarez; Jair, Francés, Gámez, Nieto; Marc Aguado, Toni Moya, Francho, Maikel Mesa; Azón y Bakis eran el once inicial blanquillo. Por su parte, Miguel Álvarez salía con una 4-4-2 con bandas con Iker Álvarez; Alti, Tasende, Hugo Pérez, Abraham; Del Moral, Carlo, Ontiveros, Rodrigo; Ferrari y Fores.

El choque ha arrancado con un Real Zaragoza incisivo, sin miedo a atacar. De hecho, los de Escribá han dispuesto de la primera del partido en el primer minuto con un centro de Gámez que ha enganchado Maikel Mesa con un buen disparo que se marchaba por encima del larguero. Los primeros diez minutos pertenecían al Real Zaragoza, superior en posesión y en ocasiones de gol. No obstante, el Villarreal avisaba en el minuto 19 con un centre de Tasende que tocaba Cristián, dejando el balón muerto para un disparo de Rodri Alonso, que conseguía taponar Carlos Nieto in extremis.

Acto seguido un buen pase de Maikel Mesa al interior de la defensa amarilla dejaba solo a Iván Azón que definía con un disparo raso cruzado que se marchaba rozando el palo. Al minuto, Bakis gozaba de una ocasión similar en uno contra uno contra Iker Álvarez, que despejaba para mandar el balón a corner. Las ocasiones se estaban produciendo pero los pupilos de Fran Escribá no lograban traspasar la meta rival.

Llegaba el minuto 27 y el filial del submarino amarillo tuvo la más clara con un pase largo para Ontiveros que realizaba un buen recorte y que obligaba a Cristian a inventarse un prodigioso pie. El partido proseguía y el Real Zaragoza no conseguía marcar ese gol que le pusiera por delante en el marcador. Era el minuto 40 cuando el Villarreal B cometió un error en la salida de balón que aprovechó Moya para robar el balón y dar un pase a Bakis que se quedaba solo ante Álvarez. El delantero realizó un disparo a media altura que el portero del equipo visitante adivinó para truncar de nuevo otra ocasión blanquilla. De todas formas, la primera parte llegaba a su fin con un empate a cero y un Real Zaragoza superior que no conseguía marcar el tan ansiado tanto que necesitaba.

LA SEGUNDA PARTE

La segunda mitad arrancaba con un Villarreal B más ofensivo, primero con un disparo lejano de Ontiveros que no intimidaba a Cristian y posteriormente con una falta en el pico del área que dab en la barrera maña. De hecho, en el minuto 51, Ferrari realizaba un gran recorte y un disparo que se marchaba lamiendo el poste de Cristian. El Villarreal B estaba avisando, quitándose complejos y demostrando la igualdad del choque.

Cuando peor estaban las cosas para el Real Zaragoza, una internada por dentro del área rival de Azón servía para dejar un pase a Maikel Mesa que con un potente disparo raso marcaba el primero del partido en el minuto 55. La Romareda vibraba y parecía que la cara le había cambiado a los pupilos de Escribá. No solamente en ataque, sino a la hora de presionar y luchar cada balón. Las sensación se palpaba en el campo y fue Francho quien, tras un pase de Nieto que rebotaba, ejecutaba un perfecto disparo a la escuadra visitante a la que Álvarez no conseguía llegar. Era el minuto 62 y el escenario era perfecto para un Real Zaragoza que hacía el tanto de la tranquilidad.

No conforme con ello, Maikel Mesa volvía a insistir con un potente disparo que blocaba en dos tiempos Álvarez, que estaba ganándose el puesto a pesar de los dos tantos encajados. El Villarreal B no se quería quedar de brazos cruzados pero la contundencia tanto en el medio del campo como en la zaga blanquilla era superior a los intentos del conjunto de Miguel Álvarez. Faltaban 15 minutos para el final y Escribá, más allá de encerrarse, sacaba a Mollejo y a Bermejo por Azón y Moya, y en el 80 Grau entraba por Aguado, que se retiraba tras un auténtico partidazo.

En los últimos cinco minutos salieron Valera y Enrich por Mesa y Bakis. A pesar de que el encuentro estaba visto para sentencia, el recién debutante Valera metía un buen pase para Bermejo que obligaba a Álvarez, de nuevo, a intervenir con una grandísima parada abajo. Quintero González, colegiado del choque, decidió dar hasta siete minutos de añadido que no gustó a La Romareda. De todas formas, el tiempo pasó y el choque llegó a su fin. Así, el conjunto de Fran Escribá cumplió con lo prometido y venció al Villarreal B en su debut liguero.

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