El Real Zaragoza afronta una semana dura, con tres partidos en una semana. Y al menos, parece que hay una buena noticia para el conjunto maño, la de Quentin Lecoeuche. El lateral francés ha saltado al césped de la Ciudad Deportiva por segundo día consecutivo, una buena noticia tras la derrota en Ferrol. A pesar de que no parece que vaya a estar disponible este domingo para grandes trotes frente al Mirandés, debería tener minutos próximamente. Quien no ha estado presente es Fran Gámez por control de cargas. Además, Enrich ha sufrido un golpe sin gravedad alguna.
Este jueves, el conjunto maño ha regresado a los entrenamientos en la Ciudad Deportiva con Lecoeuche, como ya hizo el día anterior, pero sin Gámez. El francés poco a poco va caminando hacia su puesta a punto. Eso sí, ante el Mirandés e incluso frente al Andorra tiene casi imposible ser titular y es complicado que acumule ahí una suma importante de minutos. Por lo tanto, frente al Alcorcón en casa sería el momento idóneo para su regreso real si todo va según lo previsto con tiempo largo sobre el terreno de juego.
Los que no están ni se les espera por ahora son Francho y Nieto. El primero tiene como mínimo un mes más por delante hasta su vuelta, mientras que el lateral izquierdo se ha despedido de 2023 sobre el césped. Y de buena parte del próximo año casi seguro. Por lo tanto, la responsabilidad está por ahora en el propio Lecoeuche y su sustituto hasta que se tome una determinación en el mercado de invierno. Es ahí donde no está cerrada la puerta a una nueva incorporación en función del color que tome la temporada.
EL DUELO ANTE EL MIRANDÉS
El domingo a las 18.30 horas está fijado el duelo ante el Mirandés, donde – a priori – habrá que tirar de parche. Borge y Fran Gámez cumplieron en esta complicada tesitura, pero el Real Zaragoza no consiguió vencer ninguno de sus dos partidos. También se nota la baja de Francho en el centro del campo, a pesar de que Jaume Grau cumplió con su cometido en Ferrol, igual que lo hizo Toni Moya.
Toca defender el liderato. En ello está un Real Zaragoza que necesita volver a la senda del triunfo para olvidar unas sensaciones preocupantes en una situación de máximo privilegio. Momento para reinventarse y dejar atrás las dudas de la derrota.