El transportista, motor de la economía

Tradime ha lanzado una nueva campaña para dignificar la figura del transportista
photo_camera Tradime ha lanzado una nueva campaña para dignificar la figura del transportista

Cuando vamos a comprar nos gusta que no falte de nada en el supermercado. O que en nuestra tienda de moda favorita esté ya la última colección. Incluso que las compras que hagamos por Internet nos lleguen cuanto antes a casa para poder disfrutar de ellas.

En un mercado globalizado como el actual la inmediatez está a la orden del día. Pero para que todo eso sea posible hay una profesión detrás que ha ido creciendo en responsabilidades e importancia, pero también en esfuerzo, trabajo y sacrificios personales y familiares. Hablamos de la figura del transportista por carretera.

“Creo que es una pata fundamental del banco de la economía, todo funciona con el transporte. No se puede concebir la sociedad actual sin un medio de transporte. Tenemos que recordar que cuando pedimos algo por Internet o compramos algo en algún sitio siempre nos llega en camión o furgoneta”, explica el presidente de la Asociación Empresarial de Transportes Discrecionales de Mercancías de Aragón (Tradime), José Antonio Moliner.

El presidente de Tradime, José Antonio Moliner, y la gerente, María José Pardo

En su firme apuesta por defender los derechos y obligaciones del sector, en general, y de sus asociados, en particular, y tras denunciar las malas praxis que se están dando en el transporte por carretera, Tradime quiere poner de relieve la figura del transportista, cuya imagen se ha visto perjudicada por esta situación.

Por eso, en las últimas semanas han puesto en marcha una nueva campaña a través de las redes sociales para dignificar la profesión. En los últimos años, esta figura se ha visto lastrada por el agua de la competencia desleal, escenificada en las empresas buzón (compañías españolas que tienen su sede en un país de Europa del Este pero que en realidad actúan u operan en España, lo que les permite abaratar costes salariales) y en las falsas cooperativas de trabajo asociado, que han explotado la figura del falso autónomo, con unas condiciones laborales ínfimas.

“Es un problema que ha llevado a que, sobre todo, autónomos y pequeñas empresas de transporte sufran unas situaciones precarias ante la imposibilidad de competir con los precios que provoca esta competencia desleal”, apunta Moliner.

La figura del transportista se ha visto perjudicada por la competencia desleal

A ello hay que añadir el continuo incremento de los precios del combustible, la ausencia de inversiones en el sector ante la inestabilidad política de los últimos años o la falta de relevo generacional.

“En pleno siglo XXI, el transporte es un sector estratégico para el desarrollo global de la economía y sus trabajadores merecemos estar a la altura de la importancia del papel que desempeñamos”, explica el presidente de Tradime.

Motor de la economía

Actualmente, más de seis millones de personas se dedican al transporte de mercancías por carretera en Europa. En España, el sector cuenta con más de 600.000 trabajadores. Se trata de uno de los principales motores económicos en la Unión Europea, moviendo más del 80% de las mercancías que transitan por este territorio. “En el caso de nuestro país, esta cifra sube hasta el 85%, convirtiéndose en un importante motor económico, esencial para el funcionamiento de la economía nacional. Es por ello que el transporte juega un papel vital”, en palabras de Moliner.

En Aragón, su situación geográfica como nodo de comunicaciones hacia las rutas europeas y nacionales lo convierte en un punto estratégico a nivel económico. En un radio de no más de 300 kilómetros se concentra el 60% del Producto Interior Bruto del país.

“Se trata de una situación privilegiada que permite a la Comunidad ofrecer grandes oportunidades logísticas que debemos aprovechar las empresas y autónomos del sector transportista”, añaden desde Tradime.

En este contexto, Moliner recuerda que para poder conducir vehículos destinados al transporte de mercancías existe una formación obligatoria, el denominado CAP, Certificado de Aptitud Profesional. Y es que “la importancia de la formación continua en el transporte hace profesional al sector, aumenta la eficacia y competitividad de las empresas y permite una conducción más eficiente”.

Por lo que estamos ante un sector que cuenta con un capital humano cualificado para seguir siendo motor de la economía.

El transportista es vital para que en las tiendas esté todo lo que necesitamos o nos lleguen a casa las comprar por Internet

Asociacionismo

Hacer frente a estas dificultades de manera individual es prácticamente misión imposible. Para crecer y seguir avanzando hay que aliarse. Tradime nació en los años 70, en plena Transición española. Una época en la que el asociacionismo estuvo muy presente. Los distintos colectivos se unían para dar voz a sus reivindicaciones y luchar por un futuro mejor. Los transportistas aragoneses también unieron sus voces.

Alrededor del 80% del tejido empresarial español lo componen las pequeñas y medianas empresas, las principales generadoras de puestos de trabajo. Es necesario, por ello, que este tejido cuente con organizaciones capaces de representarles y defenderles ante la problemática del mercado.

En el caso de Tradime, es la asociación más consolidada y comprometida de Aragón. Representa y defiende los derechos de todos sus asociados y ofrece un servicio integral a todos ellos.

En los últimos años, la asociación aragonesa se ha erigido como asociación referente a nivel nacional en la lucha contra la competencia desleal y en la dignificación de la figura del transportista.

El papel de Tradime en la defensa de los intereses de los asociados ha sido también fundamental. En sus 40 años de vida, la asociación ha sido parte activa de la “lucha política” para que se escuchen las necesidades y reivindicaciones del sector.

A lo largo de su historia, la asociación ha contado con más de 2.500 socios que quisieron o han querido unirse a Tradime que, desde entonces, ha actuado siempre como altavoz de todas sus voces.