Cofradía Nª Señora de los Ángeles, impulsora de la fe durante 650 años

La Cofradía de Nuestra Señora de los Ángeles y San Francisco de Asís es una de las más antiguas de la capital aragonesa
photo_camera La Cofradía de Nuestra Señora de los Ángeles y San Francisco de Asís es una de las más antiguas de la capital aragonesa

En la tradición de la Iglesia existe una gran pluralidad de cofradías, de realidades asociativas denominadas “hermandades”, “fraternidades”, definidas por diversas formas de promover la vida cristiana y la misión de la Iglesia.

En Aragón, el surgimiento de las cofradías se remonta a la Edad Media. Periodo donde se impregnan de cristianismo y, por tanto, se amparan bajo la protección de un elemento religioso. En el seno de estas agrupaciones se establecían también medios de ayuda social donde la cofradía intentaba mitigar posibles desgracias de algún miembro cofrade o de su familia, tales como la pobreza, la enfermedad o la muerte. Las cofradías se convirtieron así en una de las instituciones más vitales de las ciudades.

La Cofradía de Nuestra Señora de los Ángeles y San Francisco de Asís es una de las más antiguas de la capital aragonesa. Fundada en el año 1370 en el Convento de San Francisco, es una de las instituciones religiosas con más historia de Aragón con 650 años a su espalda y con similar antigüedad que la Archidiócesis de Zaragoza.

La Cofradía tiene como principal objetivo social la ayuda a la mujer

“El motivo de aguantar tanto tiempo se debe a su constancia, esfuerzo y tesón de los que nos antecedieron y el haber sabido transmitir su espíritu a sus sucesores de generación en generación”, ha explicado el Mayordomo presidente de la Cofradía, Jorge Navarro.

650 años de historia

La Cofradía de Nuestra Señora de los Ángeles se fue formando y completando con el tiempo. En el año 1422, se fusionó con dos otras cofradías, la de San Francisco de Asís y la de San Lucas Evangelista y fijaron su sede en el antiguo convento de los franciscanos, hoy Diputación Provincial de Zaragoza.

Tuvieron que pasar 87 años, hasta 1509, para que los frailes menores de la Cofradía de San Francisco de Asís obtuviesen la Carta de Hermandad con la que se formalizaba la entrada de los nuevos cofrades a la institución y con la que se pudo construir una capilla dentro del convento de San Francisco. Convento que no perduró en el tiempo ya que fue demolido, al igual que la capilla, por los franceses durante los Sitios de Zaragoza en la guerra de Independencia.

La capilla que posee la Cofradía en la iglesia de Santa Catalina es uno de sus patrimonios más representativos

Tras el conflicto, la Cofradía pasó por varias sedes e iglesias. En el año 1835 se traslada a la iglesia de Santa Isabel de Portugal de forma temporal y provisional, ya que se vuelven a trasladar en 1846 a la iglesia de Religiosas Clarisas de Jerusalén.

Estas últimas tenía una vinculación especial con la orden de San Francisco y colaboraban con la Cofradía acogiendo a niñas de madres con dificultades, proporcionándoles alimentos, educación y la estancia en la iglesia durante sus primeros años de vida.

Casi 100 años después, en 1943, la Cofradía parece haber encontrado su sede permanente en el Convento de Religiosas Clarisas de Santa Catalina. Sin embargo, hace dos años, en 2018, la Cofradía tuvo que cambiar su sede de nuevo a la iglesia de San Felipe y Santiago el Menor donde residen actualmente. Este último cambio vino a petición de las hermanas Clarisas, por reestructuraciones y organizaciones dentro de su propia orden y en el convento.

La Cofradía no tuvo una sede fija hasta el pasado año 2018

La Cofradía siempre ha poseído un amplio patrimonio de objetos litúrgicos en cada una de las iglesias y conventos que han ido formando parte de su historia. Piezas de varios siglos como casullas, cálices, portapaces, custodias, estolas, armarios u otros muebles, son una parte de toda una colección que permite recorrer una gran parte de la historia de Aragón.

Lo más destacable es la capilla que posee la Cofradía en la Iglesia Conventual de Santa Catalina donde se encuentran las imágenes de Nuestra Señora de los Ángeles, una talla anónima datada en torno a 1760, y la de San Francisco de Asís y la de San Lucas, realizadas por Francisco de Borja en el año 1915.

Ayuda social a la mujer

La Cofradía de Nuestra Señora de los Ángeles y San Francisco de Asís ha tenido dos objetivos principales desde su creación: el espiritual o religioso, y el social, enfocado a la ayuda a la mujer desde la creación de la Cofradía.

“En los tiempos actuales, seguimos colaborando cada año con alguna obra social, siempre relacionada con la mujer, con el espíritu de la Cofradía y nuestras creencias, de manera acorde con nuestras actuales posibilidades”, ha detallado Navarro.

La sede actual de la Cofradía se encuentra en la iglesia de San Felipe y Santiago el Menor

El objetivo social se remonta a la Edad Media, donde los cofrades ofrecían ayudas sobre todo a la mujer. La Cofradía conserva documentos que acreditan la entrega de dotes para jóvenes doncellas que no poseían recursos, así como la contribución de las primeras necesidades a los recién nacidos para luego sufragar también sus primeras educaciones y aprendizajes.

También ofrecían ayudas tanto sociales como económicas a mujeres embarazadas y en situación precaria. En lo que respecta a la salud, la Hermandad presta ayuda a los cofrades y familiares enfermos, a enterrar con solemnidad a los difuntos además de realizar asistencias espirituales.

Estas ayudas económicas realizadas por la Cofradía se obtenían de las propiedades que ostentaba la Hermandad por todo Aragón y que fue acumulando a través de su historia. Sin embargo, las sucesivas desamortizaciones decimonónicas, como la de Mendizábal y Madoz, dejaron a la Cofradía sin prácticamente ninguna de sus propiedades rusticas y urbanas. La institución se mantuvo durante muchos años en base a las limosnas y a aportaciones de sus propios cofrades.