El calendario Dinámico dice adiós a más de 70 años de historia futbolera

El calendario llevaba editándose desde los años 50
photo_camera El calendario llevaba editándose desde los años 50

“Lamentándolo con todo nuestro pesar, debemos anunciar que no se volverá a editar el Superdinámico nunca más. Han sido muchos años junto a vosotros, lo más bonito de este deporte, los aficionados. Sin embargo, el proyecto no puede seguir adelante”. Así decía adiós el calendario Dinámico después de acompañar a la hinchada futbolera durante 70 años.

La calle Río Huerva fue durante muchos años el lugar donde se cocinaba -a fuego lento- el calendario Dinámico. Fue a comienzos de los años 50 cuando Tomás Tocino padre decidió poner en marcha la idea del calendario con todos los partidos de la Primera División española. La idea era no dejar parada la imprenta durante el mes de agosto, y con esa filosofía, terminaron por hacer “el agosto” en este mes.

Desde que llegó el año 2000, Dinámico se vio obligado a cambiar su diseño

En esa época, al no haber Internet, todos los futboleros acudían al calendario Dinámico para tener un lugar donde consultar los enfrentamientos de su equipo. “300.000 ejemplares llegamos a vender en nuestro mejor momento”, señalaba Tomás Tocino hijo, actual regente del negocio. Fue en el comienzo de la década de los 70.

Todo ello se hacía con sumo cuidado, con la imprenta familiar y varios trabajadores que, a mano, ordenaban las páginas y cerraban el librito con las fechas de los encuentros. “Funcionaba tan bien que nunca tuvimos que poner publicidad. Eso sí, regalábamos a los medios importantes calendarios porque nos apoyábamos en ellos”, declaraba Tomás.

La empresa regalaba calendarios a los medios más relevantes como es Marca

Avanzaron los años, y aunque incluso en los 90 el negocio se sostenía, todo se complicó con la llegada del nuevo milenio. Las cuentas no cuadraban y tuvieron que prescindir de varios trabajadores. Externalizaron los servicios y dejaron de hacer a mano un calendario de coleccionista. “No nos quedó otra, y nos dio mucha pena porque nuestros clientes estaban encantados con el formato tradicional. Era más pequeño y no tenía color, pero tuvimos que abandonarlo”, confesaba el dueño.

Se perdió el mimo, el cuidado con el que, manualmente, esta pequeña empresa sacaba su producto adelante. En los últimos años solo quedó una trabajadora, sobrina de una de las primeras empleadas que ya se jubiló. Ahora, se ha decretado el cierre definitivo. Su clientela se reducía a un grupo de nostálgicos del fútbol y del papel, y la llegada del confinamiento supuso la puñalada final.

Dinámico se ha mantenido hasta la presente temporada

Futbolero sin fútbol

Al conocer su historia, cualquiera imaginaría que Tomás Tocino era un amante del fútbol y un conocedor absoluto de los entresijos del deporte rey. Sin embargo, no hay nada más lejos de la realidad. “Solo he ido una vez al fútbol y no me gustó. No me ha interesado nunca”, aseguraba el líder del proyecto. Eso sí, como medio de vida le ha dado muchas alegrías.

A sus 75 años, el señor Tocino busca una retirada tranquila, alejada del mundanal ruido, sin redes sociales, teléfonos e internet. Se lleva con él un pedacito del mundo del fútbol, una pequeña parte de los que disfrutan del deporte rey y del placer que supone leer una revista de colección. Toca ahora rebuscar entre las estanterías y quitar el polvo para hacerse de nuevo con una edición del calendario Dinámico.