El Hospital San Juan de Dios estrenará en mayo la nueva Unidad de Hemodiálisis para 130 pacientes al año

Esta nueva unidad cuenta con cuatro salas, dos ubicadas en la planta baja, que permiten dializar hasta 130 pacientes
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El Hospital San Juan de Dios estrenará el próximo mes de mayo su nueva Unidad de Hemodiálisis, que albergará a 130 pacientes al año. Son unas instalaciones en un edificio anexo, propiedad de los Hermanos Capuchino, que estarán equipadas con la tecnología más puntera e innovadora y los sistemas más avanzados, en un espacio en el que la experiencia del paciente y los profesionales han tenido una gran importancia en su diseño.

Esta nueva unidad cuenta con cuatro salas, dos ubicadas en la planta baja, que permiten dializar hasta 130 pacientes, y dos en la superior para tratar a personas con enfermedades infecciosas y en aislamiento. No en vano, ofrece una mayor accesibilidad a los enfermos, que, hasta ahora, tenían que acudir hasta la tercera planta del Hospital, lo que aporta “proximidad” y “flexibilidad”, como ha valorado la gerente del centro, Carmen Vicente. En total, se han invertido 1,5 millones de euros en la obra, más otros 700.000 euros en el equipamiento y la digitalización.

Además, se ha instalado la “tecnología más vanguardista del siglo XXI”, realizando una hemodiálisis “sin papel”, con “todo digitalizado” gracias a tablets a disposición del personal de Enfermería, así como plantas de agua “premium”, que ofrecen una monitorización continua de la calidad del agua. Paralelamente, apuestan por una diálisis domiciliaria, que empezará con el primer paciente después de Semana Santa, que les permite ser más autónomos y “no estar atados a un hospital”, ha relatado la responsable del San Juan de Dios.

Igualmente, las instalaciones están diseñadas bajo criterios de sostenibilidad, respeto al medio ambiente y máximo confort para el paciente, para quien se han planteado soluciones adaptadas a sus necesidades, gracias a la tecnología, con un simple “clic”. Sobresalen los amplios espacios luminosos, la climatización de suelo radiante, sillones de tres motores y pantallas digitales individuales por paciente personalizadas para información y ocio.

EXPERIENCIA PACIENTE

En su diseño, también se ha trabajado con el proyecto “Experiencia Paciente”, en el que las vivencias y opiniones de los enfermos han jugado un papel trascendental. “El diseño es más de hogar para que los pacientes se sientan como en su casa, que no sea una imagen de hospital, sino que tengan calma y tranquilidad”, ha expuesto Carmen Vicente.

En la misma línea, la responsable de Nefrología, la doctora Mercedes García, ha valorado su “visión holística” e “integral del paciente”. “No tratamos enfermedades, sino personas con enfermedad. Repercute en todas las esferas de la vida. Por eso hemos creado grupos específicos e incorporado psicología o nutrición, haciendo hincapié en la implicación del pacientes”, ha señalado.

Una cultura que la consejera de Sanidad, Sira Repollés, quiere trasladar al resto de la sistema sanitario público, para concebirlo como “personas que tratan a personas”. “Se tiene en cuenta las expectativas, vivencias y necesidades en una enfermedad que condiciona los aspectos físicos y psicológicos, que están muy bien resueltos. Estas experiencias de los pacientes entran a formar parte de la cultura de la sanidad publica. Debemos estar dispuestos a modificar toda la actitud y basar las instalaciones y la atención en la humanización. Solo así, yendo de la mano, podemos avanzar en un futuro de mas humanización”, ha resaltado.

MEDIO SIGLO DE VIDA DEL SERVICIO DE NEFROLOGÍA

Con esta inauguración, el Servicio de Nefrología del Hospital San Juan de Dios de Zaragoza conmemora sus 50 años desde su puesta en funcionamiento en 1972, que ya atiende al 50% de pacientes renales de la Comunidad. Presta una atención especializada integral para el tratamiento de pacientes con enfermedad renal crónica avanzada, que se encuentran en tratamiento sustitutivo renal crónico mediante hemodiálisis ambulatoria.

Actualmente, en él, trabajan 42 profesionales entre médicos, enfermeras y técnicos auxiliares de enfermería que se complementa con nutricionista, psicóloga, trabajadora social y personal voluntario que desarrolla diversos programas de ejercicio y acompañamiento.