Cuando dar el balón al rival no importa. El Huesca ganó a Las Palmas con un dato de posesión irrisorio, mínimo. Difícil de creer hasta para un equipo que acostumbra a dejar al rival que lleve el peso del juego. 14,6% frente a un 85,4% del cuadro dirigido por García Pimienta, en un partido en el que los de Ziganda, eso sí, se llevaron los tres puntos por efectividad y conceder pocas oportunidades.
Es el dato más bajo de la temporada en los altoaragoneses. En su racha de siete partidos sin perder, además, han doblado y hasta cuatriplicado el porcentaje. Así, en los empates contra Mirandés y Racing fue de 52,2% y 58%, respectivamente.
Antes, en la victoria a domicilio contra el Real Oviedo, los azulgranas aguantaron el 0-1 de Carrillo (también a pase de Gerard Valentín como contra Las Palmas) con un 41%. En días verdaderamente complicados, como contra el Lugo, con diez jugadores, se terminó sumando un punto con 43,5%. En la visita al Granada, el empate a cero se selló con uno de los más bajos, 32,9%, mientras que la victoria ante el Leganés en casa fue de 33,2%.
En otro triunfo, contra el Málaga, también se regaló el balón (38,6%) y frente al Ibiza, con un abultado marcador de 3-0 a favor, se registró el segundo dato más bajo del curso, con un 32,7%.
SOLO VIERA DIO MÁS PASES QUE TODO EL HUESCA
Que todos los focos apuntan a Jonathan Viera no es ninguna novedad. Tampoco que lleva la manija del juego de Las Palmas y, por tanto, capitaliza el uso del balón. Pero es que solo el centrocampista canario, con 107, convirtió más pases que toda la Sociedad Deportiva Huesca.
En total, Las Palmas intentó 826 entregas, con 748 efectivas. Los de El Alcoraz, 136 y 76 con éxito. Desglosando la sala de máquinas de los amarillos, además de su estrella, Mfulu dejó 81 y Fabio González 37 hasta ser sustituido al descanso. En la segunda mitad, el revulsivo Alberto Moleiro dejó otros 38.
Las cifras chocan con lo visto en el Huesca. Kento Hasimoto hizo ocho y Cristian Salvador, el que más, trece. Juan Carlos, como enganche, cerro su partido con seis. No obstante, en un contexto de más contundencia que creatividad, el japonés ganó todos sus duelos por bajo, nueve, y el gallego también bajó al barro para conseguir siete balones en disputas.
EL HUESCA APRIETA LA TABLA
El objetivo del Huesca, como ha transmitido el club por activa y por pasiva, son los 50 puntos. En la mochila ya van 20, casi la mitad, pero la victoria contra el líder sirvió para apretar la tabla por arriba y dormir sextos, en playoff. Equipos como Alavés (26 puntos, empatados) o Burgos (24) se han reenganchado al tren de Las Palmas, que parecía escaparse.
A buen seguro, otros como el sorprendente Albacete de Rubén Albés, Granada, Cartagena, Eibar o Levante también celebraron el fin de la racha de imbatibilidad de los canarios.
