El Alavés paraliza la buena racha en casa del Huesca (0-1)

El Huesca murió peleando, pero no vio portería y el 0-1 se lo llevó un Alavés que pelea por el ascenso
Andrés Fernández dirige en el Huesca - Alavés
photo_camera El Huesca terminó cayendo ante el Alavés por la mínimoi. Foto: S.D. Huesca

Habían pasado 15 partidos hasta que la Sociedad Deportiva Huesca volvió a perder en casa, desde esos días de competición en estado embrionario. El conjunto oscense se reencontró con la derrota en El Alcoraz por culpa de un Alavés que aspira a lo más alto, al ascenso a Primera División, y que triunfó con un gol de Tenaglia. El Huesca murió peleando, pero no vio portería y el 0-1 quedó reflejado en un marcador que llevó la alegría a tierras vascas.

Los elegidos de Ziganda eran Andrés en portería, con línea de cuatro compuesta por Ratiu, Blasco, Pulido y Vilarrasa. Cristian Salvador y Sielva se ubicaban en el doble pivote con una segunda línea de tres donde Gerard Valentín, Juan Carlos y Joaquín eran protagonistas. Arriba, Obeng ocuparía la punta de ataque. Siete cambios para los oscenses en El Alcoraz. Por parte del Alavés, Luis Rioja, Guridi o De la Fuente eran los más peligrosos.

Intensidad y dominio oscense en los primeros cinco minutos para demostrar que querían seguir haciendo de casa un fortín. Cuidado de todos modos con los de Vitoria, porque empezaban a mostrar su buen hacer entonces con balones de peligro al área. No había un dominador claro en esos primeros compases, pero sí se adivinaba que los dos equipos querían tres puntos más en su casillero. Gerard Valentín protagonizaba los acercamientos, y el más claro, allá por el 20, no lo terminó en condiciones Sielva.

Comenzaba a hilar jugadas el Alavés con un Guridi que se dejaba ver; Blasco y Pulido se empleaban a fondo, mientras que los de arriba esperaban de una contra. Un tocado Joaquín dejaba su sitio a Enzo Lombardo y, entonces, Andrés Fernández tenía que esmerarse ante un disparo de Jason. El propio Jason volvía a rematar, esta vez de cabeza, y el balón se iba lamiendo el poste. Finalizaba así la primera mitad, donde el Alavés había espabilado en los últimos compases, pero resistía el Huesca.

SEGUNDA MITAD

Una estirada de Sivera evitaba el primer tanto oscense tras un lanzamiento de falta de Sielva en el 47, y ya en el 64, Pulido no enganchó un saque de esquina de chilena. Sin embargo, sería el Alavés quien vería puerta en el 72. Un centro medido de Luis Rioja encontraba a Tenaglia, mal defendido entre Pulido y Vilarrasa, y el 0-1 era una realidad en El Alcoraz. Había resistido el Huesca, pero en un fallo defensivo se encontraba por detrás en el marcador.

Con la entrada de Marc Mateu, al Huesca se le veía algo más por banda, pero el Alavés no sufría. Se iban sucediendo los centros, pero los remates, si es que hallaban cabeceadores oscenses, siempre se iban fuera. Mérito también de un cuadro vitoriano que sabía ponérselo difícil a un Huesca incómodo este día en El Alcoraz. Aun así, Pulido estuvo a punto de hacer el empate tras un grandísimo centro de Marc Mateu, y el duelo murió con el Huesca volcado en ataque, pero sin premio. La derrota volvió al Alcoraz y el Huesca se quedó sin atar la temporada.