El Huesca recupera la sonrisa a domicilio ante el Lugo (1-2)

El Huesca se impuso por 1-2 al Lugo y consiguió después de varios meses imponerse lejos del Alcoraz
Los jugadores del Huesca se abrazan tras vencer al Lugo
photo_camera El Huesca venció 1-2 al Lugo logrando tres puntos a domicilio siete meses después. Foto: S.D. Huesca

Por fin, después de un año atroz fuera de casa y de meses y meses sin lograr el triunfo, la Sociedad Deportiva Huesca ha vuelto a vencer a domicilio. Siete meses después. Lo ha hecho frente al Lugo, equipo ya descendido a Primera RFEF, pero ha valido para maquillar mínimamente esa agonía lejos del Alcoraz. Javi Martínez y Obeng en dos minutos brillantes encarrilaron el triunfo en el Anxo Carro y deja al Huesca con 52 puntos en su casillero.

Volvía al ruedo el Huesca con cinco novedades en el once. Se mantenía en portería Andrés, con una línea de cinco compuesta por Juanjo Nieto y Marc Mateu en los carriles, mientras que Rubén Pulido, Jeremy Blasco y Florian Miguel se colocaban en el centro de la defensa. Pronto cambió el dibujo, con Mateu algo más adelantado y el tercer central en el lateral izquierdo. Kento y Cristian Salvador se ubicaban en el doble pivote, con Lombardo por la derecha y Javi Martínez en la mediapunta. Arriba, Obeng.

Los primeros minutos transcurrían sin grandes alardes. La mayor parte del primer cuarto de hora, por no decir la práctica totalidad, había tenido lugar en zonas intrascendentes del juego. Apenas un centro del Lugo servía para levantar el ojo hacia la pantalla y una salida del atento Andrés. Javi Martínez remataba allá por la media hora sin grandes aspiraciones en un duelo que se le estaba poniendo ya cara de 0-0.

Y menos mal que estaba Andrés, porque podía ser todavía peor en el 32. Jugadón de Moyano que remataba Juanpe y el arquero se vestía de héroe para mantener la meta a cero. Lo cierto es que el jugador lucense hacía lo que quería ante la defensa altoaragonesa, y solo Andrés y el miedo ganador de un descendido impedían el gol. Respondía Obeng ya en el 43, pero quedaba todo anulado por claro fuera de juego. Aun así, había fallado la clara ocasión en el área del Lugo.

Final sin más dilación del primer asalto, con el Lugo merecedor del tanto y un Huesca que aspiraba de momento al empate. Mal duelo de los de Cuco Ziganda que, durante la mayor parte del partido, parecía el equipo descendido. El Lugo quería más, especialmente despedirse con buen sabor de boca de una competición de la que puede considerarse un clásico ya.

SEGUNDA PARTE VICTORIOSA

Pero todo cambio en el segundo asalto. Se atrevió Javi Martínez cuando corría el minuto 48, probando de lejos y encajó la pelota a la derecha, muy ajustada y perfecta. 0-1 en el marcador. Y en dos minutos perfectos, cuando el electrónico señalaba el 49, Obeng pondría la puntilla. El delantero del Huesca se hacía un autopase medido para plantarse solo ante el meta del Lugo y hacer el 0-2 en el Anxo Carro. Comenzaba arrasando el Huesca, con una solvencia que parecía perdida.

El cuadro de Ziganda se dedicaba a defender y a tratar de matar a la contra a su rival. La estrategia había funcionado por ahora, y rondaba el tercero sobre la cabeza del Lugo. Se trataba de aguantar, como bien hacía el cuadro altoaragonés, que parecía otro. Pero los fantasmas volverían cuando menos lo parecía. El Lugo botaba una falta al corazón del área y ahí aparecería el incombustible Sebas Moyano para meter un cabezazo que terminaría en el fondo de la portería. 1-2 y a punto estuvo de calcar Barreiro la de Obeng, porque un minuto después tenía todo a favor para el empate, pero salvó Pulido.

Gol anulado a Soko y vuelta al ataque de un Lugo que avanzaba peligrosamente. Pero de ahí al final, el Huesca supo manejar los tiempos y mantener a raya a los locales. En el Anxo Carro, los de Cuco Ziganda volvieron a vencer fuera de casa, cuestión que al menos palia ese mal sabor de boca y alcanzan los 52 puntos. Momento de pensar en la próxima campaña y evitar los apuros de este tramo final.