El hijo de Giménez Abad pide seguir ahondando en la "derrota moral y pública" de ETA

Los letrados Pablo Guerrero y Santiago González han recibido los premio Giménez Abad
photo_camera Los letrados Pablo Guerrero y Santiago González han recibido los premio Giménez Abad

“Una vez derrotada ETA, tenemos que seguir trabajando para construir una narrativa que refuerce nuestra cultura democrática frente a quienes desde los extremos o desde un nacionalismo excluyente tratan de destruir los valores que defendemos”. Con estas palabras Manuel Giménez Larraz recordaba la figura de su padre en el “Homenaje a la palabra”, que cada 6 de mayo se celebra en las Cortes para recordar la figura del exlíder del PP en Aragón, asesinado por ETA en Zaragoza en el año 2001.

“Recordar es la única manera de detener el tiempo”, ha sentenciado el hijo de Gimenez Abad, que ha agradecido a la Fundación que copreside haber mantenido los valores de “igualdad, libertad y tolerancia” que representaba el político aragonés y haber agrandado su memoria pública, “llevándola a territorios donde el terrorismo de ETA ha quedado contrapuesto con la incontestable altura moral y ética que representan sus víctimas”.

Giménez Larraz, visiblemente emocionado, ha querido agradecer a la Justicia y los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado que llevan años trabajando para señalar al autor material del político aragonés -“Ojalá dentro de poco tiempo podamos poner cara y ojos al asesino de mi padre”, señalaba- y ha recordado a tres compañeros de Giménez Abad fallecidos recientemente: Chesús Bernal y Francisco de Llobet -ambos patronos de la Fundación que él copreside- y el exparlamentario del PP en las Cortes de Aragón, Antonio Torres.

Por último, ha alertado sobre la necesidad de preservar la memoria constitucional de los “vaivenes partidistas” y a huir del “relativismo político” a la hora de juzgar los hechos.

Barba pone en valor el diálogo y la tolerancia

La presidenta de las Cortes, Violeta Barba, ha sido la encargada de impartir el discurso de apertura de este acto, en el que ha aprovechado para despedirse de la Institución. Barba ha centrado su figura en evocar la figura de Manuel Giménez Abad como paradigma de una manera de hacer política tolerante y respetuosa. “Quienes lo conocieron señalan su carácter abierto y dialogante y su pasión por Aragón”, ha señalado Barba, que ha remarcado la importancia de volver a esos valores en un parlamento en el que se echa en falta “reflexión, mesura, capacidad de diálogo e incluso a veces sentido del humor”.

“Hoy es preciso recordar que el otro puede tener razón y que nadie es dueño de la verdad”, ha remarcado Barba, que ha alabado el trabajo de la Fundación por “la defensa del modelo democrático y territorial, fomentando el pluralismo y el acuerdo”.

Pablo Guerrero y Santiago González, premios Giménez Abad

Además, los letrados Pablo Guerrero y Santiago González han recibido los premios Giménez Abad por sus trabajos “Freno constitucional al endeudamiento y descentralización política: El impacto del principio de estabilidad” y “El control como función primordial del Parlamento en la era de la gobernanza”.

Guerrero se ha mostrado muy orgulloso de recibir este premio, al que ha calificado como “un premio de un prestigio inconmensurable a nivel nacional gracias a la labor de la Fundación”. Además, ha querido hacer al profesor Carlos Garrido y a sus familiares.

Además, Guerrero ha hecho una llamada a la juventud a proteger las instituciones democráticas ya que son “el templo de la palabra y la garantía del control político del poder”. “Para vosotros, la democracia es algo tan natural como el planeta o tan indispensable como Internet, pero ni siempre ha sido así ni tenemos la garantía de que lo sea en un futuro. El poder es expansivo por naturaleza y amenaza a instituciones como esta y hay que defenderlos contra aquellos que creen ser tenedores de la verdad única”, ha concluido.