A las doce del mediodía se ha guardado un minuto de silencio en homenaje a los fallecidos a causa de la pandemia del coronavirus. La delegada del Gobierno en Aragón, Pilar Alegría, ha presidido este acto en Zaragoza para “recordar a las más de 27.000 víctimas que hemos tenido por el coronavirus y agradecer el trabajo y el esfuerzo ímprobo de los profesionales sanitarios, pero también de muchos trabajadores esenciales que con su esfuerzo y dedicación han hecho menos dramáticos estos días”.
En el acto han participado también el presidente de las Cortes de Aragón, Javier Sada; el Justicia de Aragón, Ángel Dolado; el presidente de la Diputación de Zaragoza, Juan Antonio Sánchez Quero; el subdelegado del Gobierno en Zaragoza, Fernando Beltrán, así como representantes del Gobierno de Aragón, del Ayuntamiento de Zaragoza y de la Federación de Municipios y Provincias. Además, han estado presentes el jefe superior de la Policía Nacional en Aragón, el general de Movilidad Aérea, el comandante militar y general director de la Academia General Militar y el general de la Guardia Civil en la Comunidad, entre otros.
La delegada ha vuelto a hacer un llamamiento a la ciudadanía, de nuevo ante un fin de semana, para seguir extremando las medidas de higiene y contacto. “Estos días tenemos cifras muy esperanzadoras, pero eso no nos puede llevar a bajar la guardia. El virus sigue existiendo, convivimos con él y debemos ser prudentes y responsables”, ha explicado Alegría.
Este acto de homenaje se ha repetido también en las subdelegaciones de Huesca y Teruel, estando presidido por los subdelegados Silvia Salazar y José Ramón Morro, y con representación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. En el caso de Huesca ha participado también el alcalde, Luis Felipe.
El luto oficial declarado por el Consejo de Ministros el pasado 26 de mayo, en homenaje a los fallecidos a causa de la pandemia coronavirus, finalizará en la medianoche de este viernes. Durante este periodo de diez días de luto, que ha sido el más largo de la historia democrática española, la bandera nacional se ha mantenido a media asta en el exterior y con un crespón en la moharra del mástil en el interior, en todos los edificios públicos del país, en las oficinas de España en el exterior y en los buques de la Armada. Estos símbolos volverán a su posición original esta noche al finalizar el luto.
