El confinamiento del año pasado y las nuevas incertidumbres han hecho que se incremente la necesidad de profesionales formados en mediación e intervención familiar en Aragón. El rector de la Universidad de Zaragoza, José Antonio Mayoral, y la consejera de Ciudadanía y Derechos Sociales, María Victoria Broto, han rubricado esta mañana un convenio de colaboración entre ambas instituciones para el desarrollo de actuaciones que fomenten la formación en mediación e intervención familiar en la Comunidad.
“Este año, más que nunca, y después de un confinamiento que nos ha puesto a prueba como sociedad, como personas y como familias somos aún más conscientes de la importancia que tiene este recurso de mediación e intervención cuando la ayuda de un profesional pueda solucionar, atajar o minimizar un conflicto”, ha indicado la consejera tras la firma del acuerdo, que, con excepción del pasado año, viene renovándose desde 2017.
Por su parte, el rector ha resaltado que “la Universidad de Zaragoza mantiene un firme compromiso con los Objetivos de Desarrollo Sostenible porque apuesta por la alianza entre las instituciones y porque el acuerdo tiene como finalidad impulsar estudios que fortalezcan la toma de decisiones consensuadas y justas para el beneficio de todas las partes”.
A través del convenio sellado, el Gobierno de Aragón, a través de la Dirección General de Igualdad y Familias, se compromete a financiar las diferentes actividades formativas que se desarrollen en 2021 durante la impartición del posgrado de la Universidad de Zaragoza “Experto Universitario en Mediación” curso 2020-21, dirigido a profesionales y titulados universitarios, y a personas que desempeñan actividades profesionales en organizaciones y entidades sociales, empresariales, educativas o de la Administración Pública.
Dichas actividades son las siguientes: incorporación de recursos que favorezcan la formación en línea para poder atender la docencia no presencial; incremento del profesorado profesional de prácticas para atender una docencia más concentrada e intensiva de carácter práctico; y la celebración del décimo aniversario de la Ley de Mediación Familiar de Aragón.
Otra de las actuaciones incluidas en dicho convenio son los seminarios del Máster de Intervención Familiar y Sistémica, promoción 2020-21, dirigido a aquellos profesionales de los servicios sociales, sanitarios y educativos de atención a las familias. Entre los contenidos a tratar, figuran las intervenciones psicosociales en tiempos de crisis, la convivencia con la incertidumbre en contextos multiculturales o la intervención terapéutica breve en familias con adolescentes.
La aportación del Gobierno de Aragón es de 8.000 euros, destinados a cubrir los gastos de honorarios, desplazamientos y alojamiento del profesorado y ponentes de los cursos y seminarios, derivados de las actividades de organización y coordinación; así como la adecuación de la impartición formativa en formato digital.
La formación en estas materias vino motivada por los cambios experimentados por la sociedad española, que han dado lugar a diversidad de modelos familiares, con la complejidad implícita que conlleva la existencia de las diferentes estructuras familiares. Desde 2020 y también en la actualidad, la demanda de los servicios de estos profesionales ha experimentado un incremento dado el mayor tiempo de convivencia, las restricciones, o las nuevas formas de relaciones que ha impuesto la pandemia. El nuevo escenario, con sus incertidumbres y temores, siguen poniendo a prueba a las familias.
La intervención sobre las dinámicas y conflictos familiares necesita profesionales altamente cualificados que posean los conocimientos adecuados para comprender y ayudar a resolver los conflictos que precisen de la intervención de una persona mediadora, ofreciendo una alternativa a la vía judicial.
