La receta más clásica de nuestras abuelas o el producto que nace en el pueblo de al lado son la base de toda la gastronomía tradicional. En defensa de ella, y ante la crisis que sufre por un mundo cada vez más globalizado, Gastromanía ha reunido a decenas de expertos, periodistas, comunicadores y cocineros en torno a este tema de conversación y a las posibles soluciones que existen.
Entre el 8 y el 9 de junio, y en el espectacular entorno del museo Pablo Gargallo de la capital aragonesa, una serie de ponencias, charlas, mesas redondas y debates forman el armazón de un ciclo que certifica, en su cuarta edición, su vigencia. Gastromanía se afianza como un evento anual necesario para reflexionar sobre la situación de la cocina aragonesa y española, y como creador de soluciones para el futuro.
Academia e instituciones, de la mano por la gastronomía aragonesa
La inauguración de Gastromanía ha estado protagonizada por la directora general de Turismo de la DGA, Gloria Pérez, y el presidente de la Academia Aragonesa de Gastronomía, Ángel González. Ambos han coincidido en la necesidad de defender la cocina tradicional de la comunidad y en la importancia de hacer llegar al máximo público las bondades de los platos aragoneses.
Pérez, que ha repasado y valorado positivamente las tres primeras ediciones del ciclo, ha señalado que la cocina aragonesa tiene “una tradición milenaria”. “En un mundo globalizado, nos olvidamos de lo que tenemos más cerca”, ha señalado Pérez, que ha animado a todo el sector a “recuperar las recetas más clásicas y a reivindicar los productos aragoneses”.
La directora general de Turismo ha terminado su intervención presentando a los diferentes ponentes que participarán en Gastromanía, una cita que “pone de manifiesto proyectos que han funcionado y que demuestran que la gastronomía es parte del patrimonio universal de la humanidad”.
Un programa que rebosa actualidad culinaria
Tras las presentaciones de rigor, Gastromanía ha continuado con un reconocimiento a Lourdes Plana, directora de la Real Academia de Gastronomía, por su aportación al mundo de la cocina en los últimos tiempos.
Después de este bonito galardón, el evento ha continuado con una primera mesa redonda titulada “¿Qué lugar ocupa y ha ocupado la cocina tradicional española en la vida cotidiana y en los restaurantes?”. Los casos de La Rioja y de Canarias, y como las instituciones han trabajado en la recuperación de sus platos tradicionales; y las complicaciones que han llevado a esta situación de crisis en la cocina española han completado el cartel de la primera jornada.
El segundo día de Gastromanía comienza con dos ponencias enfrentadas: la primera, en busca de la cocina tradicional en los restaurantes actuales y, la segunda, reflexionando sobre la dificultad para encajar las últimas innovaciones culinarias en las recetas de toda la vida. La segunda mesa redonda del ciclo ayuda a los asistentes a encontrar cocina clásica, tradicional y típica en toda España y en Aragón. Cierra la programación una charla sobre cómo las fiestas populares han ayudad a conservar la cocina tradicional en Extremadura y las posibilidades que copiar este modelo ofrecería a otras comunidades.