Los sindicatos denuncian la “situación insostenible” de las oficinas de la Seguridad Social

De “caótica situación” califican CSIF, UGT y CCOO la falta de trabajadores públicos en las oficinas de la Seguridad Social
Los sindicatos se han concentrado a las puertas del INSS en la calle Pedro Cerrada de Zaragoza
photo_camera Los sindicatos se han concentrado a las puertas del INSS en la calle Pedro Cerrada de Zaragoza

De “caótica situación” califican CSIF, UGT y CCOO la falta de trabajadores públicos en las oficinas de la Seguridad Social. Los tres sindicatos mayoritarios denuncian que se ha perdido casi la mitad de plantilla con respecto a 2014, hasta un 10% solo en los últimos cuatro años, y que existe un centenar de vacantes sin cubrir.

Con el objetivo de dar a conocer estas problemáticas y reivindicar mejoras, los representantes de los trabajadores se han concentrado este jueves por la mañana a las puertas de la Dirección Provincial del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) en Zaragoza. Los portavoces han afeado la falta de previsión del Ministerio dirigido por José Luis Escrivá: “Desde que un funcionario entra a trabajar, se sabe a fecha fija cuándo se jubilará; no es un problema súbito y llevamos años avisándolo”, ha declarado el portavoz de UGT, Martín Lanzas.

“UNA PLANTILLA ESCASA Y SIN FUTURO”

“No pedimos ninguna mejora salarial, sino más manos en el trabajo; que los ciudadanos se tengan que ver en la interminable situación de pedir cita previa y que nunca les atiendan”, aclara el portavoz de CSIF, Paco Domínguez. En Aragón actualmente hay 493 trabajadores del INSS, un 10% menos que antes de la pandemia. La situación es especialmente preocupante en Zaragoza, explican, donde de las cinco oficinas de las que los ciudadanos disponían, dos han cerrado en los últimos cuatro años: San José y Corona de Aragón.

No solo el número de trabajadores preocupa a los sindicatos, sino también la media de edad. “La mayoría de los trabajadores tenemos más de 55 años”, afirma el portavoz de CCOO, Ignacio Galán, “y esto supone un gran problema en cuanto al futuro de la atención: si no hay una oferta de empleo pública pronto, dentro de cinco años solo quedará el 20% de la plantilla actual”.

“UNA ADMINISTRACIÓN HOSTIL”

A lo largo de las oficinas aragonesas se repiten diariamente las colas para ser atendidos en trámites como prestaciones sociales, jubilaciones, bajas laborales o incluso el Ingreso Mínimo Vital. “Hemos pasado de ser una administración amable con el ciudadano a ser hostiles”, confiesa Lanzas. “Incluso antes de llegar a la propia ventanilla, los servicios telefónicos para pedir cita también están colapsados”, ejemplifican.